Arzalluz acusa a los no nacionalistas de hacer creer que el PNV es igual a ETA
El tema de la violencia y las repercusiones que ésta tiene en los nacionalistas fue uno de los ejes que eligió ayer Xabier Arzalluz para dirigirse a los militantes de su partido en Guipúzcoa, en un acto de precampaña electoral celebrado en San Sebastián. El presidente del PNV acusó a los sectores no nacionalistas de pretender echar sobre su partido el estigma de la violencia y hacer creer que "ETA y PNV es lo mismo" para derrotarles políticamente. "Parece que la bomba la hemos puesto nosotros", dijo Arzalluz en alusión al último atentado de ETA en Madrid.Todos los asistentes al mitin, en el que se presentaron los cuatro cabezas de lista para el Congreso por el País Vasco y Navarra, permanecieron un minuto en silencio como repulsa al asesinato del teniente coronel Pedro Antonio Blanco.
En respuesta a las críticas a su partido por su ausencia en la manifestación de Madrid, el presidente del PNV declaró: "No veo por qué nosotros tengamos la necesidad de ir por aquello de que buscan la unidad de los demócratas cuando lo que quieren es que aquí nos separemos unos de otros". Agregó que personas "aparentemente preocupadas" por la situación del PNV le telefonearon para invitarles a la manifestación de Madrid y asegurarles que estarían "debidamente arropados". "Yo, por supuesto, les dije que no", concluyó.
Arzalluz recriminó a ETA que esté favoreciendo electoralmente a aquellos que tacha de enemigos. "No hay forma de que vean que están favoreciendo, precisamente, al que dicen ellos que es el adversario, que cada acción de ellos o cualquier kale borroka [lucha callejera] lo que hace es dar votos y motivos a otros".
Criticó tanto al PSOE como al PP por denunciar las amenazas o ataques a sus viviendas -concejales y cargos locales de ambos partidos están padeciendo ataques contra sus domicilios y amenazas anónimas- porque, según dijo, "lo que quieren es ir de perseguidos, porque eso es lo que necesitan". Ahondó en ese punto asegurando que con esas tácticas "estamos viendo hasta qué punto se necesitan unos y otros". Añadió que los dirigentes del PNV también reciben amenazas y no las airean a diario.
El presidente del PNV fue condescendiente con Euskal Herritarrok (EH) y dijo que su posición en estos momentos es "difícil", aunque le pidió que "aclare ante este pueblo que no tiene que haber violencia y que en su camino de hacer política digan que la violencia está de sobra".
En este sentido, recriminó al PP que exija a EH una condena expresa de la violencia cuando los populares no han condenado el levantamiento militar que dio lugar a la Guerra Civil. "Estamos rodeados de cínicos y ya es hora de que empecemos a calcular cuál es nuestro interés. Por cumplir la palabra dada hemos sido inferiores, al estar rodeados de gente cuya palabra no tiene mayor caducidad que la del yogur", destacó.
Arzalluz instó a ETA a dejar las armas porque, argumentó, el día que eso suceda "Madrid no podrá controlar a los nacionalistas", y añadió que esa organización terrorista está buscando una salida "desesperadamente".
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