Joaquín Cortés vuelve al País Vasco con el espectáculo mestizo "Soul"

El bailarín Joaquín Cortes regresa esta semana al País Vasco para presentar, por segunda vez en menos de un mes, su espectáculo Soul (alma), que en sintonía con sus trabajos anteriores surge de las raíces flamencas y las formas de la danza contemporánea, sustentadas sobre la firmeza técnica. Si en diciembre Cortés actuó ante el público de San Sebastián, en el Kursaal, mañana y el domingo estará en el auditorio del Palacio Euskalduna (20 horas).Soul ha sido descrito como un homenaje al mestizaje cultural. En el último espectáculo de danza de Cortés se mezclan el recuerdo al gospel, a la cultura gitana, al ambiente de la Habana Vieja y al mundillo de los toros. El montaje no pierde de vista los elementos de identidad del flamenco, pero su música, interpretada en directo, invita al público a dejarse llevar al Chicago de los años treinta, o a la época de Mozart.

Cortés (Córdoba, 1969) sorprendió positivamente al público y despertó las críticas de los defensores del purismo con el atrevido tratamiento que dio al flamenco en su montaje Cimbayí. El éxito internacional de sus propuestas llegó poco después con el espectáculo Pasión gitana, con el que recorrió medio mundo.

La danza no agota los proyectos profesionales de Joaquín Cortés. En pocas semanas el bailarín tiene previsto suspender temporalmente sus actuaciones para comenzar el rodaje de la película Gitano, dirigida por Manuel Palacios, antes de abordar otros proyectos cinematográficos en los Estados Unidos.