Chaves pide a la Cámara de Cuentas que perfeccione sus controles para detectar comportamientos corruptos

El consejero mayor de la Cámara de Cuentas, Rafael Navas, renovó ayer su mandato al frente del organismo fiscalizador de la comunidad autónoma. Navas, que ha sido elegido por el resto de consejeros (7) para regir la institución tres años más, tomó posesión ante el presidente de la Junta, Manuel Chaves, quien, tras reconocer su trabajo, le exigió "seguir profundizando" en el perfeccionamiento de los controles que lleven a la denuncia de "comportamientos corruptos". Navas advirtió que, para este cometido, lo más eficaz es insistir en los controles internos de la Administración.

Chaves aseguró, en su discurso, que el Gobierno andaluz "no escatimará esfuerzos" en la mejora de la "transparencia y eficacia" de la Administración y mantuvo que "no han existido tantos ni tan precisos mecanismos de control de los fondos públicos como hasta ahora". El presidente de la Junta brindó su apoyo institucional a la Cámara de Cuentas y dijo que impulsará "la transparencia administrativa" y abrirá "cauces a la participación de los ciudadanos".El consejero mayor de la Cámara de Cuentas recogió el guante que le lanzó Chaves, pero advirtió que la mejor manera de evitar esas prácticas fraudulentas en las Administraciones autonómica y local es incrementar "el control interno" de la gestión de los fondos públicos, y saludó la iniciativa de la Consejería de Economía para aplicar una auditoría continua de los gastos de las Consejerías andaluzas. Navas, en su discurso de posesión, indicó que pretende consolidar la Cámara de Cuentas en una nueva faceta: "Hay que caminar hacia un órgano de opinión y estudio que le dé a la institución una autoridad incuestionable"

La intención de Navas es que la Cámara de Cuentas se convierta en un punto de referencia en cuestiones técnicas que deben resolver las administraciones en su labor diaria. "Los criterios sobre cuándo se deben provisional los créditos morosos", sería, según el consejero mayor, una de las cuestiones sobre las que el parecer de la Cámara debería tomarse en cuenta, y rebasar así la limitación del organsmo fiscal a realizar informes sobre gestiones ya realizadas.

Consenso parlamentario

La Cámara de Cuentas mantendrá, para este mandato, la representación consensuada por los grupos parlamentarios: de los siete consejeros, tres han sido propuestos por el PSOE, dos por el PP (entre ellos el propio Rafael Navas), uno por Izquierda Unida y otro por el PA.

Navas, en conversación con los periodistas, insistió en la necesidad de afrontar una reforma de la norma que rige la Cámara de Cuentas, una iniciativa que corresponde al Gobierno andaluz o al Parlamento autonómico. Entre los asuntos que deberían incluirse en la norma, el consejero mayor mencionó la introducción de mecanismos que consoliden las competencias sobre las corporaciones locales o la regulación de como deben ser las relaciones entre la Cámara de Cuentas y otros organismos fiscalizadores como el Tribunal de Cuentas nacional.

Chaves recibió de Navas el informe de la Cámara sobre la cuenta general de este año, que incluye estudios sobre la implantación del euro, las actuaciones para paliar el Efecto 2000 y la gestión de las empresas públicas de la Junta.