Los diabéticos piden que la Seguridad Social financie las bombas de insulina
Los diabéticos usuarios de bombas de insulina se han dirigido al Síndic de Greuges para reclamar que la sanidad pública asuma el coste de estos dispositivos. Estos enfermos consideran que sufren una "discriminación", según explican en el texto presentado al Síndic. Los enfermos insulinodependientes que necesitan una bomba deben costear íntegramente su importe, unas 700.000 pesetas. A esta cifra debe añadirse la compra de los catéteres que se recambian cada 3 días y cuyo coste mensual puede alcanzar las 40.000 pesetas, según Montserrat Borrego, una de las integrantes del colectivo. La Administración costeaba hasta ahora el total del valor de estos consumibles, pero ahora ha reducido su aportación hasta un máximo de 25.000 pesetas mensuales.
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