_
_
_
_

Macao gozará de autonomía de Pekín los próximos 50 años

La última colonia portuguesa pasará esta medianoche a soberanía china

A medianoche de hoy (siete horas antes en la Península), las autoridades de Lisboa arriarán la bandera portuguesa en Macao. El acto pondrá fin al imperio ultramarino portugués y acabará con la presencia europea en China, tras la entrega de Hong Kong en 1997. La devolución de Macao, el primer establecimiento europeo en Asia (1557), cierra el proceso descolonizador portugués, con heridas abiertas en Timor y Angola, y prepara el camino para la ansiada reunificación china, ahora con los ojos puestos en Taiwan.

Más información
Una transición sin sobresaltos

La devolución de Macao es el último acto de un proceso descolonizador ciertamente traumático que comenzó durante la revolución de los claveles, en 1974. Este territorio chino bajo administración portuguesa (de 22 kilómetros cuadrados y unos 450.000 habitantes) es una réplica en minúsculo de la vecina Hong Kong, pero ha alcanzado una renta per cápita de 17.000 dólares, el doble que la metrópoli. A pesar de la proximidad en su entrega a Pekín, ambas regidas por el modelo chino "un país, dos sistemas", sus historias son completamente diferentes. Hong Kong fue invadida por los británicos durante las guerras del opio, a mediados del siglo pasado, y Macao fue cedida por un emperador mediante sobornos. Londres se resistió a perder Hong Kong y Lisboa intentó en dos ocasiones la devolución de Macao. La transición de Hong Kong fue crispada (el último gobernador, Chris Patten, fue calificado de "criminal" por Pekín), mientras la transferencia de Macao ha sido amigable y ejemplar, a juicio de ambas partes.La diferencia entre sus economías es abismal, pero los 10 casinos abiertos día y noche en Macao rentaron el año pasado más de 380.000 millones de pesetas de beneficios, constituyendo la base de su economía y el 60% de su presupuesto oficial. El Casino de Oriente no es sólo juego, prostitución y mafias. Las autoridades portuguesas dejan una herencia discreta. Su cultura y tradiciones forman parte de la idiosincrasia local y Macao constituye el último reducto de una lengua latina con estatuto oficial en Asia (aunque sólo sea hablada por un 2% de la población), frente al difuminado castellano de Filipinas. Además se ha convertido en un nuevo símbolo de la reunificación china, cuyas autoridades consideran ahora "urgente" el regreso de Taiwan a la soberanía de Pekín.

La nueva Región Especial de Macao, con similar estatuto al de Hong Kong, dispondrá de un alto grado de autonomía política, al menos en los próximos 50 años. Las libertades principales (expresión, prensa, asociación, huelga o religión) están formalmente garantizadas, si bien Amnistía Internacional (AI) ha denunciado esta semana una situación preocupante. A juicio de AI, Pekín han negociado con Lisboa una legislación "vaga e imprecisa" que podría provocar en algún momento la sustitución de las leyes de Macao por las del régimen comunista, abriendo de esta forma las puertas para una posible suspensión de los derechos constitucionales. Asimismo, no se descartan medidas de Pekín para controlar el negocio del juego e ilegalizar a la secta Falun Gong, autorizada en Hong Hong y Macao.

Este riesgo no es compartido por las autoridades de Lisboa ni por el nuevo gobernador de Macao, que esta noche tomará posesión de su cargo. El ex banquero Edmund Ho, de 44 años y quien se define como "no comunista", garantiza la continuidad del régimen especial y defiende el modelo chino para ambos enclaves: "Serán necesarios muchos años, tal vez una generación, para valorar y comprender los beneficios que producirá este sistema".

Portugal deja un territorio moderno, con buenas infraestructuras y una economía estable. No obstante, muchos se quejan de que Lisboa ha perdido decenas de años en afianzar una cultura que poco a poco irá desapareciendo. Entre los más críticos se encuentran los representantes de la Iglesia católica. El padre Teixera, con 60 años en Macao, afirma que "muy poco se puede hacer ahora para invertir 450 años de historia". Y el responsable de los jesuitas, Luis Sequeira, explica: "No hay que hacerse ilusiones. Es preciso ser conscientes de que, en última instancia, quien va a mandar en Macao es la China continental. De todas formas, tenemos confianza y pensamos que su devolución puede ser un punto de partida, y no de llegada".

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

La Iglesia católica (con una comunidad de unas 40.000 personas, la mayoría chinas) ha sido el gran motor del territorio, al dirigir más de 30 escuelas donde estudian unos 50.000 niños, además de mantener numerosos centros de asistencia social, asilos y guarderías. El obispo Domingos Lam, el primer prelado chino de la historia de Macao, explica, diplomático: "No veo para el próximo milenio el dominio de una filosofía, china u occidental. Creo que se organizarán vías de compromisos a escala global".

En cualquier caso, el primer ministro, el socialista António Guterres, ha transmitido su "confianza" en el futuro de Macao, y el presidente de la República, Jorge Sampaio, cree que "el balance ha sido muy positivo en el territorio. Salimos con la cabeza bien alta y podemos decir: valió la pena".

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_