Sanidad propone a los tres hospitales del Vallès la gestión de la asistencia pública del Hospital General de Cataluña
El Departamento de Sanidad ha planteado a los tres hospitales de la XHUP (red de utilización pública) situados en el Vallès que gestionen la parte de la asistencia sanitaria que presta el Hospital General de Cataluña (HGC) para el Servicio Catalán de la Salud, básicamente radioterapia y asistencia coronaria. El HGC presentó en noviembre expediente de quiebra voluntaria al no poder hacer frente al pago de sus deudas y los intereses de los créditos.El consejero de Sanidad, Eduard Rius, indicó ayer que su departamento está a la espera de que se nombren los tres síndicos de la quiebra, entre los cuales espera tener a un representante. El hospital debe más de 9.000 millones de pesetas a Hacienda y la Seguridad Social y 3.600 millones a la Generalitat. Rius declaró que el Gobierno catalán hará lo posible para facilitar la continuidad de la labor asistencial del centro, aunque está claro que el edificio pasará a propiedad de las administraciones públicas, dada la magnitud de la deuda contraída con éstas.
Para facilitar esa continuidad, Sanidad ha propuesto al Consorci Hospitalari de Terrassa, la corporación Parc Taulí de Sabadell y la Mútua de Terrassa que asuman la gestión de la parte asistencial pública, que en el último año alcanzó un valor de 1.748 millones de pesetas. "Si además quieren gestionar la parte privada, será cosa de ellos", dijo ayer el consejero, que no descartó esta posibilidad, aunque para ello "habrá que ver si realmente el hospital es viable". En todo caso, Rius dejó claro que se ha entrado "en una situación diferente que no pasa por el actual equipo gestor del hospital".
Nuevo Sant Pau
El titular de Sanidad confirmó que las obras del edificio del nuevo hospital de Sant Pau empezarán antes del verano y que el centro estará terminado en el año 2004. Sanidad ha llegado a un acuerdo con la Muy Ilustre Administración, entidad integrada por el Ayuntamiento de Barcelona y el obispado, titular del recinto hospitalario, para el reparto de las inversiones necesarias. La Generalitat aportará 10.000 millones de pesetas y la Muy Ilustre Administración entre 6.000 y 7.000 millones, que proceden en su mayor parte de la enajenación de una parte del patrimonio que tenía la entidad, que había sido beneficiaria de numerosos legados y donaciones.
Por otra parte, Rius anunció un plan para identificar mediante la tarjeta sanitaria a los usuarios de la sanidad cuando adquieren medicamentos en las farmacias. Este plan tiene como objetivo evitar el fraude en el uso de recetas para pensionistas y también mejorar la calidad de la prescripción, ya que este sistema permitirá observar si un paciente está tomando medicamentos incompatibles.
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