Los nacionalistas atacan al PP por unir la ruptura con el PNV y el acuerdo sobre los recursos fiscales
Los partidos nacionalistas arremetieron ayer contra el presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz, por haber vinculado la ruptura de relaciones entre el PNV con un eventual fracaso de las negociaciones que mantienen las administraciones vascas y el Ministerio de Economía y Hacienda para que el Estado retire los recursos judiciales presentados contra normas fiscales. Especial malestar ha causado la sugerencia de Iturgaiz de que la actitud peneuvista podría dificultar la próxima renovación del Concierto Económico. La patronal vasca ha exigido que el Concierto quede fuera de las disputas partidistas.
Relacionar la refriega entre dos partidos con el trabajo institucional entre dos administraciones es "confundir las cosas", declaró el lehendakari, Juan José Ibarretxe, en el Parlamento. Fue la suya la respuesta más suave a las manifestaciones realizadas el día anterior por Iturgaiz tras la "ruptura total de relaciones" con el PP y el Gobierno central anunciada por el PNV. El dirigente popular vasco señaló que con su actitud los peneuvistas ponen "en difícil situación" el acuerdo que se estaba gestando entre Madrid y Vitoria para que el Estado retire los recursos judiciales contra diversas normas fiscales (en general, las que establecen incentivos a la inversión empresarial), a cambio de que las haciendas forales revisen los aspectos más conflictivos de las mismas.Iturgaiz indicó que las conversaciones están muy avanzadas y llegó a sugerir que la deriva soberanista del PNV podría también dificultar la revisión del Concierto, que corresponde abordar el próximo año, al complirse los primeros veinte desde su aprobación en 1981.
Instrumento de todos
Ibarretxe subrayó que "no es bueno" introducir en las relaciones entre partidos un instrumento de autogobierno del conjunto de la sociedad vasca como es el Concierto Económico. Fuentes del PP admitieron en privado que Iturgaiz no estuvo "excesivamente acertado" al introducir la cuestión de los recursos contra normas fiscales en la crisis abierta entre ambos partidos. En este sentido destacaron que son los populares, desde la Diputación de Álava, quienes más están trabajando para conseguir que no se judicialice la aplicación del Concierto y que se retiren los recursos. Especialmente crucial es el referido a las minivacaciones fiscales de 1993, que ha suscitado que el Tribunal de Justicia de Luxemburgo entre a estudiar la compatibilidad de las ayudas fiscales vascas a empresas con el Tratado de la Unión Europea. No obstante, dichas fuentes populares criticaron que los nacionalistas aboguen por separar el plano partidista e institucional y no lo hagan en la práctica, ya que han replicado a las duras declaraciones de Aznar con la decisión de votar contra unos Presupuestos del Estado "con los que están de acuerdo".
El portavoz peneuvista en el Congreso, Iñaki Anasagasti, señaló, en sintonía con Ibarretxe, que la ruptura entre el PNV y el PP no tiene por qué trasladarse a las relaciones entre el Gobierno central y el vasco, "que tienen que velar por intereses generales". Anasagasti acusó a Iturgaiz de "sectario" y de tratar de "sacar la cabeza" en la crisis entre ambos partidos. Con la referencia a los recursos contra las normas fiscales "nos dice que, si no nos portamos bien y no estamos quietecitos, esto [el Concierto] va a sufrir", opinó Anasagasti, quien agregó que "con las cosas de comer no se juega".
En un tono más institucional, la patronal vasca Confebask abogó en un comunicado porque el Concierto, como patrimonio del conjunto del la sociedad vasca "quede al margen de las disputas partidistas". La patronal considera "poco acertadas" algunas manifestaciones realizadas en este ámbito y reitera que la defensa del Concierto Económico, como parte del ordenamiento jurídico español, corresponde "tanto a las instituciones autonómicas como al Gobierno central".
Por su parte, el ex presidente de EA, Carlos Garaikoetxea, aseguró que la postura de Iturgaiz "raya las actitudes fascistas" y manifiesta "una concepción patrimonialista e instrumental de las instituciones".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.