Esta vez
Esta vez no es la antigua Yugoslavia, sino la vieja URSS.Esta vez no es Kosovo, es Chechenia.
Esta vez no es Slobodan Milosevic (el desconocido), es Borís Yeltsin (el vodkahumano andante).
Esta vez no es una limpieza étnica, sino terrorismo.
Esta vez no son seres humanos, niños, hombres y mujeres: son terroristas a los que hay que combatir y eliminar de la faz de la tierra.
Esta vez es Grozni la que está a punto de ser barrida por las bombas y el Ejército ruso, que ha desempolvado sus armas de exterminio.
Esta vez es Rusia, que para justificar los últimos atentados cometidos este verano en su capital, Moscú, y cercanas las próximas elecciones a la presidencia de la república coloca sus misiles y sus tanques en el punto de mira de esa región del Cáucaso.
Los refugiados a lo largo de las fronteras ya ni se cuentan. Un invierno muy crudo les espera.
Esta vez la comunidad internacional poco hace y dice.
Se me encoge el corazón, se me alarga el alma.- . .
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.