Regalo de Navidad

Hace dos años y medio regresé, junto a mi marido, de Estados Unidos después de vivir allí cinco años. La mayoría de nuestras pertenencias (libros, fotos, ropa, etcétera) se quedaron allí. No teníamos el dinero para traerlas y pasó un año y medio hasta que conseguimos ahorrar la cantidad necesaria para realizar el traslado (algo menos de 400.000 pesetas). Nuestra sorpresa llegó cuando recibimos una carta de Hacienda donde se nos reclama el pago del IVA correspondiente a las "mercancías importadas" (335.000 pesetas). Este IVA fue calculado sobre la estimación que nosotros hicimos para el seguro de nuestras cosas; claro que, ¿en cuánto se valoran los álbumes de fotos de cinco años de tu vida? Debido a que desde nuestra llegada a España hasta que trajimos nuestros objetos personales transcurrieron más de 12 meses (lo de ahorrar está un tanto difícil), la ley sobre importaciones considera que ya no son tales. Después de recurrir recibimos por única respuesta un talón de cargo con el consecuente recargo por apremio. En este país, a Hacienda primero se le paga y dentro de unos años se verá si tiene razón. Me parece impresionante que me salgan con que tengo que pagar el IVA sobre mis zapatos, mi ropa... En resumen, de cosas que la mayoría fueron con nosotros cuando salimos de España y volvieron convertidas en "mercancías importadas". Y me parece ya el colmo que antes de que se decida si tenemos o no razón te exijan el pago de un dinero que no tenemos y que no devolverán hasta que fallen el recurso. ¡Feliz regalo de Navidad!- . .