El Banco de España retrasa y suaviza la nueva circular sobre morosidad

La nueva circular sobre morosidad que prepara el Banco de España tendrá que esperar algo más de lo previsto y será algo menos exigente de lo inicialmente planteado. No obstante, se espera que lo apruebe este mes. Su entrada en vigor se producirá seis meses después de que sea aprobada, lo cual supone que no lo hará como pronto hasta junio del próximo año, según confirmaron fuentes financieras. Además, la circular reducirá los fondos que las entidades han de reservar para cubrir un hipotético repunte de la morosidad.

El Banco de España ha decidido, tras un análisis de los datos aportados por bancos y cajas de ahorros, ralentizar la aprobación y entrada en vigor de la circular que exige más fondos a la banca para que las entidades estén más protegidas en el supuesto de que cambie el ciclo económico y la morosidad, ahora en niveles mínimos, comience a asomar al cabeza.La intención inicial del Banco de España era que la circular se aprobara en el consejo de gobierno que se celebró ayer, con el fin de que fuera de aplicación durante este mismo ejercicio.

Sin embargo, según señalaron fuentes financieras, el organismo ha decidido aplazar esa aprobación y, detalle más significativo, que su puesta en marcha no se haga automáticamente después de que se apruebe, sino seis meses después. Eso supone que las cuentas de resultados de las entidades no se verán afectadas durante este ejercicio por la circular y que ésta no se aplicará al menos hasta el mes de junio del año próximo.

Otra de las novedades que se han producido respecto a los primeros borradores de la circular es una disminución de la cuantía de los fondos que el Banco de España pretendía que las entidades financieras trasladasen a la hucha contra la morosidad. La posición de partida era que el llamado Fondo de Estabilización y Cobertura agultinase, calculado en media ponderada, en torno al 0,7% del saldo crediticio de las entidades financieras.

Este tope se ha reducido hasta una media del 0,5%, aunque fuentes financieras insisten en que la redacción definitiva de la circular aún no está cerrada y que todavía puede haber algún tipo de ajuste.

Las entidades financieras han insistido a lo largo de todo el proceso de negociación de la circular, que se inició antes del pasado verano, en que la filososofía de la propuesta del Banco de España era absolutamente compartida por ellas. Sin embargo, estimaban que el coste final de la nueva norma era demasiado elevado. Los primeros cálculos situaban éste en alrededor de 300.000 millones de pesetas para el conjunto del sector.

Un tercer asunto que estaba en discusión era el tratamiento fiscal de estos nuevos fondos. La pretensión de los bancos y las cajas de ahorros era que su aplicación acarreara beneficios fiscales. Esta propuesta se ha encontrado con la rotunda negativa del Ministerio de Economía y Hacienda, que ha estado siguiendo muy de cerca todo el proceso de gestación de la nueva circular.

Fuentes financieras recalcan, no obstante, que es posible que estos nuevos fondos tengan, finalmente, el tratamiento de impuesto diferido.