Salto a la titularidad

Son como ese delantero centro con grandes cualidades que, sin embargo, nunca acaba de conseguir la titularidad. Trabaja a fondo en los entrenamientos, reajusta la dieta para conseguir el tono muscular más apto a sus necesidades y dedica muchas horas a ver vídeos de decenas de partidos. Pero sigue en el banquillo esperando eso que en el argot se llama la gran oportunidad. Los Sencillos no se dedican al fútbol, aunque han dedicado algún tema a este deporte y, pese a que su segundo disco, Encasadenadie, tenía un par de golazos por toda la escuadra, no convirtió a la banda en titular de las listas. Acaban de publicar su sexto elepé, Colección de favoritas, y esperan que gracias a él dejen de chupar banquillo. Argumentos tiene de sobras, pues este disco supone un reencuentro de la banda con el pop, con esas canciones que se adhieren a la segunda audición, permitiendo que su tarareo haga un poco más agradable esto de vivir.

Sus letras, con cierta carga generacional a cuestas, sobrevuelan el día a día fijándose en los aspectos más cotidianos, añadiendo un cierto tono de melancolía y una pizca de tristeza. El remate son unos arreglos que pueden recordar a Pet Shop Boys o a Saint Etienne, grupos que Miqui Puig y los suyos saben leer en clave personal.

Esta noche se inicia en la barcelonesa sala Bikini (22:00 horas) un nuevo asalto del grupo Los Sencillos a la titularidad, y para ello nada mejor que usar su último trabajo, Colección de favoritas, como el mejor regate.-