Empresas marbellíes se mudan a Burgos para acogerse a una red de fraude fiscal

Las investigaciones sobre comportamiento irregular de inspectores de la Agencia Tributaria afectan ya a cuatro comunidades autónomas. El último caso, denunciado a la fiscalía por la propia Agencia, está protagonizado por miembros de la inspección de Hacienda en Burgos. Se trata de una red que aseguraba inspecciones fiscales suaves y sin consecuencias a empresas con domicilio social en Marbella si se trasladaban formalmente a la provincia de Burgos, según la denuncia presentada por los servicios jurídicos de la Agencia Tributaria ante la Fiscalía Anticorrupción primero, y ante la fiscalía de Burgos después. Entre las empresas implicadas figuran propietarias de campos de golf y de servicios portuarios. La Agencia incluye en su denuncia a un jefe de la unidad regional de inspección de Burgos, Javier Pardilla, que ocupó el cargo de teniente de alcalde del ayuntamiento de la capital por el Partido Popular; un ex jefe de la inspección en la provincia de Burgos, actualmente en excedencia, Javier Cobo Valeri, y un subinspector en activo. A pesar de que ya han transcurrido varios meses desde la presentación de la denuncia por parte de la fiscalía de Burgos, la investigación está bloqueada por un conflicto entre dos juzgados, que rechazan recíprocamente en favor del otro la competencia sobre el asunto. Además del caso de Burgos, la Agencia Tributaria mantiene bajo sospecha a inspectores en Cataluña, Madrid y la Comunidad Valenciana.