Interior cree que ETA está recomponiendo su aparato logístico ante un posible fin de la tregua

El Ministerio del Interior considera que ETA está intentado recomponer su aparato logístico en España, bastante maltrecho o quemado tras las últimas acciones policiales. La necesidad de reabastecerse de material ante una hipotética vuelta a la actividad en territorio español explicaría las dos últimas acciones de la banda -el robo frustrado de una troqueladora de matrículas y la inmediata sustracción de otra-, según fuentes de la lucha antiterrorista. Ambas actuaciones son, en cualquier caso, "un mal síntoma", en palabras del ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja.

Las citadas fuentes han venido observando que ETA ha intensificado en los últimos meses sus labores para recomponer parte de su infraestructura y aprovisionarse de material, como lo demuestran el fallido robo de explosivos en Francia y la sustracción de la troqueladora. Interior está convencido de que el aparato logístico de la organización está "bastante tocado", ya que a los escondites y el material localizados por la policía hay que añadirles aquellos otros pisos, garajes o almacenes que se consideran inseguros o quemados porque pueden estar sometidos a vigilancia policial.Las fuentes consultadas están convencidas de que ETA pretende usar para acciones en España la troqueladora y las placas vírgenes de matrículas robadas el sábado en Eibar (Guipúzcoa) por dos terroristas a cara descubierta. La deducción es sencilla: "Con esa máquina sólo se pueden fabricar matrículas españolas". Las placas sustraídas están ya dotadas con la marca al agua del escudo español, lo que hace más difícil que la policía localice las placas duplicadas.

Los vehículos que sean dotados con las placas falsas podrían utilizarse para inmediatos transportes de material y personal y para hipotéticas acciones terroristas en el caso de que la banda decidiera romper el alto el fuego. "Todo indica que siguen trabajando por si acaso, sobre todo en reaprovisionamiento; algo a lo que nunca renunciaron", indicaron las citadas fuentes.

Los responsables de la lucha antiterrorista sospechan que el encargado de recomponer el aparato logístico podría ser Xabier García Gaztelu, Txapote, "aunque eso está aún por comprobar definitivamente", explican. García Gaztelu, compañero de crímenes de Valentín Lasarte en el comando Donosti, participó con éste en los asesinatos del dirigente socialista Fernando Múgica y del concejal del PP de San Sebastián Gregorio Ordóñez, entre otros.

Dicho activista supuestamente habría aparcado la pistola y se habría hecho cargo de la dirección logística tras la detención en Francia de su anterior responsable, José Javier Arizcuren, Kantauri, ya que ETA tomó hace tiempo la decisión de duplicar sus jefaturas para que el titular del cargo, en el caso de que la policía lo detuviera, fuese inmediatamente sustituido.

Interior también tiene claro que "una nueva generación" de supuestos etarras está perpetrando estas acciones de aprovisionamiento, "siguiendo instrucciones de gente más experimentada". En esta situación se encontrarían los dos jóvenes, de 22 y 20 años, detenidos el miércoles en Irún cuando supuestamente iban a robar una troqueladora de matrículas. No obstante, también se está investigado si en las labores de logística y aprovisionamiento estarían participando miembros del aparato militar de ETA que se encontrarían inactivos.

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, se refirió precisamente ayer a la corta edad de quienes están participando en las últimas actuaciones de ETA, informa . Tras un mitin en un batzoki de Getxo (Vizcaya), Arzalluz dijo que los jovenes vascos deben tener como "consignas" el euskera y la tecnología, porque "eso sacará adelante a Euskadi y no la gasolina". A su entender, empujar a los jóvenes a la actividad terrorista es "cortarle las alas" a una generación.

Una vez concluido el mitin, Arzalluz aseguró desconocer cuál era exactamente el objetivo del comando de ETA interceptado en Irún y mostró cierta sorpresa por el hecho de que el Ministerio del Interior optara "por la versión más suave"; es decir, el robo en lugar de un hipotético secuestro, un asunto que "sería más grave, evidentemente". también atribuyó el inmediato robo de la troqueladora de Eibar a las tareas de aprovisionamiento de ETA.

Fuentes del Gobierno vasco consideraron ayer que la tregua no peligra, ya que la organización declaró el alto el fuego confiando en que los nacionalistas podrían avanzar en la construcción nacional sin recurrir a métodos violentos, algo que, a su juicio, garantiza la actual situación de los partidos nacionalistas.