_
_
_
_

Golpe en un banco de Marbella

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Roberto Fiore y Massimo Morsello, neofascistas italianos que han adquiridido casas y terrenos en Los Pedriches (Valencia), no se refugiaron solos en Londres. El grupo de camaradas era mucho más amplio y llegó a tener hasta 15 miembros. La mayoría de ellos ha corrido peor suerte que estos dos líderes del grupo neoazi International Third Position.Alibrandi se arriesgó a volver a Italia y murió en un tiroteo; Luciano Petrone, uno de los autores del robo al banco de Andalucía en Marbella en el que se desvalijaron 182 cajas de seguridad, fue extraditado y entregado a las autoridades italianas.

El Gobierno inglés no lo entregó por este robo, perpetrado en 1982 y en el que la banda obtuvo un botín de 1.200 millones de pesetas. Petrone había asesinado a dos policías en Roma y cumple una pena de 40 años de cárcel. Antes de su extradición gozó de la protección de Fiore y Morsello, que acudieron a las sesiones en la Corte de Londres para darle su apoyo y ayudaron a su novia.

Más información
Cientos de jóvenes españoles se alojan en Londres en hostales de dos neofascistas

Fiore y Morsello han mantenido una larga batalla judicial hasta conseguir salir ilesos de las peticiones de extradición de su país por el atentado de Bolonia en el que fallecieron 85 personas. Un atentado con el que niegan cualquier relación. La condena inicial de Fiore, de nueve años, se redujo finalmente a tres. Acaba de conseguir un permiso para regresar a Italia.

A Morsello se le ha permitido volver porque ha alegado que padece un cáncer terminal. Además de liderar la ITP, ambos dirigen Forza Nuova, grupo de extrema derecha italiano.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_