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AGACHADIZA COMÚN

Volar al despiste

Las orillas de los embalses tienen algo más que las huellas de las subidas y bajadas de nivel de las precipitaciones irregulares. Las agachadizas llegan puntuales a su cita invernal en el embalse del Puente de la Cerrada, que se encuentra en Jaén, y que se ha convertido en el escenario de su migración.Un tamaño modesto, un color perfectamente combinado que le permite disponer de un fácil y eficaz camuflaje, apto para pasar desapercibido entre la vegetación que elige para vivir y un pico especialmente fino y alargado. Lo utiliza para buscar, entre los rincones profundos que el fango tiene cerca de la orilla, el alimento que allí permanece escondido.

En esta ave de tamaño modesto que rara vez supera los 25 centímetros llaman la atención los diversos sonidos que emiten, en el suelo o en pleno vuelo. De algunos de ellos todavía se saben muy pocas cosas.

A su lado podemos encontrar otro apreciable conjunto de especies limícolas, llamadas así porque aprovechan los recursos alimenticios en la misma zona. Quizá la característica que más las distingue es su peculiar modo de volar en zigzag, que bien pudiera tratarse de una sofisticada estrategia para evitar la buena puntería de algunos agresores armados.

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