La oposición pide explicaciones a Alperi por bloquear el plan para proteger el legado arqueológico de Alicante

Los dos grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Alicante, Socialista y Esquerra Unida, consideraron ayer "muy grave" la decisión del gobierno local, del PP, de paralizar la redacción del plan especial de zonas arqueológicas de la ciudad. Esta iniciativa fue anunciada a bombo y platillo hace seis meses por el PP para poner coto a las tensiones urbanísticas en lugares de interés arqueológico, y dejar claro en qué lugares de la ciudad no se puede construir.Ambos grupos de la oposición coincidieron en resaltar la falta de voluntad política del alcalde, Díaz Alperi, por la conservación del legado histórico de la ciudad. "El patrimonio de Alicante tiene cáncer irreversible", proclamó el edil de EU José Luis Romero, quien recordó "el atentado contra el monte Benacantil que supondrá la construcción del palacio de congresos".

El portavoz del Grupo Socialista, José Antonio Pina, anunció ayer que su grupo redactará una moción al próximo pleno para exigir al equipo que preside Díaz Alperi que "desbloquee la redacción del plan y lo elabore con urgencia".

En opinión del portavoz adjunto de los socialistas, Pablo Rosser, el PP municipal está propiciando que más de un promotor acabe en los juzgados por atentar contra el patrimonio. "El Ayuntamiento está dando licencias sin tener en cuenta los restos arqueológicos y, al final, quien va a pagar el pato son los constructores, que se respaldan en unos permisos municipales que no les obligan a realizar las prospecciones arqueológicas", señaló el concejal.

Esquerra Unida, por su parte, pedirá explicaciones sobre la paralización del plan especial en la próxima comisión municipal de Urbanismo. Para el portavoz del grupo, José Luis Romero, que no descartó solicitar un pleno extraordinario para debatir el asunto, "es muy grave" que el PP anuncie la redacción de un plan especial de zonas arqueológicas como justificación de que está incumpliendo el decreto de 1987, que distinguía hasta cinco zonas arqueológicas en Alicante, y luego no lo elabore. "Todos dábamos por hecho que ese plan que anunció el PP se estaba realizando", dijo Romero. A su entender, Díaz Alperi pasa por encima de la arqueología, del medio ambiente y del patrimonio del municipio para favorecer la especulación en la construcción indiscriminada de viviendas.

Tanto socialistas como EU resaltaron la discriminación que han sufrido algunos promotores, a quienes sí se les aplicó el decreto de 1987, frente a la mayoría, que ha obtenido licencias sin obligarles a realizar las catas arqueológicas.