Los regantes del Vinalopó apoyan el trasvase a partir de Cortes porque el agua es más barata que desde Tous

Los usuarios del futuro trasvase del Júcar-Vinalopó apuestan decididamente por el trazado que recoge agua del embalse de Cortes para llevarla hasta Villena, frente a la opción de iniciar el recorrido en el pantano de Tous. Según los cálculos de los regantes, el agua que recibirían desde Cortes les costaría 15 pesetas por metro cúbico, mientras que traerla al Vinalopó desde Tous dispararía la factura hasta casi el doble.

Aguas del Júcar, la sociedad estatal creada por el Ministerio del Medio Ambiente para ejecutar obras en esta cuenca, prevé terminar a mediados del 2002 el trasvase al Vinalopó, que costará 33.000 millones de pesetas (la mitad a pagar por los usuarios del agua). A falta del informe de impacto ambiental del ministerio, la conducción partirá desde el embalse de Cortes, un trazado muy criticado por los partidos de izquierda y por los ecologistas porque atravesará la Muela de Cortes, de gran valor ecológico.Frente a Cortes, los críticos defienden un trazado desde el embalse de Tous, que amortiguaría su impacto al discurrir en paralelo a grandes carreteras. Sin embargo, elevar el agua del trasvase desde Tous a Villena implica un alto sobrecoste energético para los regantes. Cortes está a una altura de 330 metros por debajo de Villena y Tous, a 600 metros, por lo que resulta más barato bombear el agua desde la primera porque la diferencia es menor. Según los cálculos de los usuarios, si por el trazado elegido pagarán 15 pesetas por metro cúbico, desde Tous la cifra se dispararía hasta casi el doble.

Los cultivos del Alto Vinalopó (33.402 hectáreas de secano y 8.593 de regadío) y del Medio Vinalopó (27.183 y 21.315) están sobreexplotados y consumen, respectivamente, 45 y 115 hectómetros cúbicos. Pero los recursos anuales, según las cuentas del presidente de la Comunidad General de Usuarios del Alto Vinalopó, Andrés Martínez Espinosa, son de tan sólo 73 hectómetros. Por ello, es necesario extraer agua de los pozos, que ya alcanzan hasta 600 metros de profundidad. Y hasta en los pozos con más reservas hay que añadir una media de tres metros cada año para extraer agua.

El coste medioambiental es enorme y el económico tiene cifras: a una peseta por cada 10 metros de profundidad, cada metro cúbico les sale a 15 pesetas. No es uniforme; mientras a los agricultores del Alto Vinalopó les cuesta entre 10 y 15 pesetas, para los del curso bajo del río la cifra se eleva hasta 25 pesetas. Un sobrecoste que estos últimos regantes, según Luis Altet, presidente de la Comunidad de Usuarios del Medio Vinalopó y L"Alacantí, están dispuestos a asumir en parte en las cuentas del futuro trasvase. Es decir, pagarán más por el agua del trasvase que los del Alto Vinalopó.

El envío del agua desde el Júcar, una vieja reivindicación de las comarcas del norte de Alicante, ya está aprobado por la Confederación Hidrográfica del Júcar. De momento, siempre que haya excedentes en el Júcar, se podrán enviar hasta un máximo de 80 hectómetros cúbicos al año. Los usuarios sostienen que el agua paliará la extracción masiva de los pozos pero no solucionará totalmente el problema de los acuíferos.