Rayos y truenos
El olfato periodístico ha acertado al etiquetar a esta contienda de fútbol final de siglo como "Liga de los Truenos", porque todos van detrás del Rayo, un equipo de un barrio madrileño, famoso por constituir lugar incómodo en el plano sociorreligioso y foco de atracción de la juventud del "pico". Algo nuevo le han inyectado al Rayo Vallecano, que le ha dado un dinamismo inusitado a su modesto plantel. Dicen los medios entendidos que es el equipo más regular por sus resultados. El de Vallecas se pone de líder de los 20, que miran pensativos y sorprendidos al rival inesperado.Todavía hay mucha Liga por delante y puede pasar de todo. Sin embargo, según el dicho popular, cambiado de signo, "Quien bien anda, bien acaba", y el Rayo va muy bien encaminado. Su moral deportiva la demuestra en el terreno de juego, soportando la briega y la bronca con ecuanimidad, más atento al esférico que a la cartulina.
Su aspiración es permanecer, y no es poco para un equipo que sube de Segunda y aún no tiene ni figuras ni cartel. De todos modos, ahí está el "Rayito", aspirando a ser el campeón de la "Liga de los Truenos".-
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