Castellano promete incentivos a los funcionarios pero olvida la negociación

Serafín Castellano pretende impulsar "el tránsito del viejo concepto de funcionario al nuevo concepto de servidores públicos" a través de una reforma de la Ley de Función Pública, según anunció ayer en las Cortes. El consejero de Justicia y Administraciones Públicas afirmó: "Se trata de dotar a la carrera funcionarial de motivaciones e incentivos".Sin embargo, hasta la fecha, no ha hecho un solo gesto público para solventar una cuestión acuciante. La negociación colectiva con los 80.000 funcionarios a su cargo para establecer las retribuciones del próximo ejercicio está congelada. El plazo máximo para recoger los acuerdos alcanzados al respecto con las organizaciones sindicales termina el próximo día 30, cuando concluye el plazo de admisión de enmiendas a los presupuestos de la Generalitat.

Las secciones sindicales de UGT y CC OO al servicio de los funcionarios públicos ya han expresado sus reivindicaciones y han hecho patente su impaciencia por la falta de respuesta de parte de Castellano.

Ambas centrales coinciden a la hora de exigir que la subida salarial del 2%, recogida en los presupuestos, vaya acompañada de una dotación específica para recuperar el poder adquisitivo que cedieron por la desviación del IPC en el ejercicio pasado y por unos fondos adicionales que permitan compensar la congelación salarial sufrida en años anteriores.

Los dos sindicatos mayoritarios en el seno de la Función Pública también solicitan la convocatoria de ofertas públicas de empleo para crear hasta 12.000 nuevas plazas al servicio de la Administración autonómica, para dotar plazas vacantes y la convocatoria de los preceptivos concursos de traslados. De momento, sólo han recibido la callada por respuesta de parte de Castellano.

Xavier Rius, de CC OO, acusó ayer al Consell de "no creer ni respetar la negociación colectiva de los empleados públicos". Rius recordó que el Consell no ha ofrecido respuesta a las exigencias de los funcionarios y advirtió sobre posibles movilizaciones en el plazo de una semana. Gonzalo Fernández, de UGT, comentó que Castellano ya ha consumido sus primeros 100 días de gracia al frente de la consejería y también concedió un plazo de una semana para abrir las negociaciones formales.