Los sindicatos denuncian nepotismo en la contratación de interinos por la Generalitat Parientes de altos cargos del Gobierno catalán y de CiU logran empleos sin concurso

En la Administración autonómica catalana se producen casos de nepotismo en favor de una pequeña parte de los interinos que, a pesar de serlo, ocupan puestos de mando sobre funcionarios. Ello sucede porque entran en la Administración autonómica por procedimientos poco transparentes. Así lo sostienen las tres centrales sindicales mayoritarias, CC OO, Catac y UGT, representadas por Manuel García, Luis Blanco y Francesc Nécija, máximos responsables respectivamente de estos sindicatos en la Administración autonómica. Estos contratos afectan incluso a familiares del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol.

Como empleados de libre designación figuran un buen número de personas vinculadas a altos cargos del Gobierno de la Generalitat o dirigentes de CiU. La situación de interino, a la que se accede por designación arbitraria, es el mejor aval para conseguir una plaza de funcionario en la Administración catalana, un método que ha provocado numerosas suspicacias, según opinan los tres sindicatos.El pasado 24 de abril de 1998, el cuarto hijo del presidente, Pere Pujol Ferrusola, contraía matrimonio en el monasterio de Sant Cugat con Mayka Zorita. Pocos meses antes (el 1 de febrero de 1998), María del Carmen Zorita Castañer -de profesión relaciones públicas- firmaba un contrato laboral como interina para encargarse de las relaciones públicas de la Secretaría General de la Juventud, que depende del Departamento de Cultura. Zorita no atendió a las llamadas de este diario.

Unos años antes, Turismo de Cataluña contrató como responsable de promoción turística en Helsinki (Finlandia supone aproximadamente el 1% del mercado turístico catalán) a Eulàlia Cabana Pujol, sobrina de Jordi Pujol. Sus contratos anuales desde 1993 sólo pasaron concurso en una ocasión, en la que fue candidata única.

Su contrato privado es singular, se adjudica sin concurso cada año como un "arrendamiento de servicios" (7,5 millones este año). La promotora en Finlandia comenzó a trabajar en 1993 como contratada administrativa, sin celebrar concurso, según consta en varias respuestas parlamentarias del consejero Antoni Subirà, de IC-V.

Núria de Gispert, titular de Justicia desde 1995, tiene a su hija, Clara Díez de Gispert, contratada en el gabinete de Informática Judicial de la Generalitat, que se encuentra en las propias dependencias de Justicia.

Clara Díez tiene un contrato temporal como "técnica de apoyo" del Centro Informático de la Generalitat (Cigesa), una entidad que la Generalitat ha privatizado en favor de la alemana Debis. Tras la privatización, Cigesa pasó de ser empresa pública de la Generalitat a contratista de la Administración catalana. La hija de la consejera tiene contrato por servicio desde de septiembre de 1998 y acude diariamente a su trabajo de Cigesa en el Departamento de Justicia. El paquete de Justicia supone para Debis la parte del león de la privatización (unos 3.000 millones).

De Gispert considera "normal" la situación de su hija, "ya que depende de una empresa privada", según fuentes oficiales de Justicia. La consejera fue anteriormente secretaria general de Justicia; en ese periodo su sobrino, Josep Maria de Gispert, se incorporó como "interino" auxiliar de prisiones. Años después aprobó oposiciones de funcionario.

Xavier Hernández, consejero de Enseñanza de la Generalitat desde 1996 y dirigente de UDC, desempeñó anteriormente el cargo de secretario general de Comercio, Consumo y Turismo con el democristiano Lluís Alegre como consejero. Hernández coincidió con la contratación como "interina" de María del Mar Hernández Moya en la Dirección General de Consumo de Barcelona. La contratada sin concurso "es la hija de un primo que falleció hace muchos años", según el consejero, que asegura no haber intervenido en su contratación.

La madre de María del Mar, Laura Moya Samarra, también accedió como "interina" a la Dirección General de Comercio Interior del departamento en el que Hernández fue secretario general. Una sobrina del consejero Hernández, Desirée Romero Hernández, también es "interina" en la Generalitat, según explica el propio Hernández, quien asegura que nada tuvo que ver en su contratación.

Entre 1983 y 1990, Xavier Hernández fue director general de los Servicios Penitenciarios de la Generalitat; en esa fase su sobrino Ferran Hernández Moya se incorporó como "interino" al personal de la prisión Modelo, que dependía de Hernández. Este sobrino aprobó después las oposiciones.

Marià Morera, actual secretario general de Enseñanza, fue subdirector de Régimen Interior y Administración con Hernández en Consumo, Comercio y Turismo. Cuando ejercía ese cargo, su pariente Isabel Garriga Praut accedió como abogada "interina" de la Dirección General de Consumo. En las últimas oposiciones, Garriga regularizó su situación y hoy es funcionaria.

Los accesos a la Administración sin concurso oposición han afectado a dos cuñadas del líder democristiano Josep Antoni Duran Lleida, aunque éste asegura que "nunca movió un dedo en su contratación". Primero fue Alicia Colls, contratada por Turismo durante varios años (ya no lo está), y posteriormente M. Lluïsa Colls, que sigue prestando servicios en Turismo de Cataluña como contratada laboral, aunque el convenio del consorcio considera preceptivo el concurso.

El COPCA, dependiente de Subirà, contrató sin concurso a Xavier Espasa Añoveros, hijo de la jefa de gabinete de Subirà, M. Teresa Añoveros. En Obras Públicas, su secretario general, Josep A. Grau Rainès, logró que su esposa, Natividad Fernández, que era funcionaria del Grupo C en la Dirección General de Transportes, ascendiera meteóricamente al cargo de asesora "interina" (Grupo A-22) de la Junta de Aguas.