Una vecina denuncia al alcalde de Pego por supuestos insultos, amenazas y agresiones físicas

Una mujer de 64 años de edad, Consuelo Siscar Sendra, ha iniciado los trámites para denunciar al alcalde de Pego, Carlos Pascual, por insultos, amenazas y agresiones físicas. Consuelo Siscar es una de las más de 300 personas afectadas por los polémicos planes urbanísticos con los que el gobierno local pegolino, que dirige con mayoría el grupo independiente que lidera Pascual, pretende recaudar 2.000 millones de pesetas por el cobro de "tasas urbanísticas" que deberán abonar los propietarios de terrenos en las zonas recalificadas. El plan urbanístico que afecta a Benitubes, donde el Consistorio tiene previsto construir una urbanización de 400 chalés, fue aprobado en un controvertido pleno en el que más de dos centenares de propietarios mostraron su oposición al proyecto, y acusaron al alcalde de "ladrón". Entre los propietarios que llenaron la sala de plenos esa noche se encontraba Consuelo, quien también mostró su indignación por la decisión del alcalde. El pasado sábado caminaba por una calle céntrica de Pego con su nieto de tres años de la mano cuando se topó con el alcalde. Según relata la mujer, Pascual le salió al paso y le increpó: "¿Ahora no me gritas?", en referencia a su actitud en el pleno, e iniciaron una pequeña discusión. Según la versión de Siscar, Pascual se dirigió a ella con violencia e insultos como "mala puta", "desgraciada" y "malparida". La situación se hizo tan tensa que la mujer acabó respondiendo a la agresión con más insultos, y el alcalde levantó su brazo hacia ella. Dos vecinos testigos de los hechos les separaron. Como consecuencia del enfrentamiento, Consuelo resultó herida en dos dedos de la mano derecha y con daños en el músculo del hombro.

Este diario intentó ayer recabar la versión del alcalde sobre el suceso sin éxito. Su secretaria manifestó que "el alcalde no le daba importancia al tema".