El jazz se apodera de la semana con el arranque de los festivales de Ciudad Lineal y Galapagar

El otoño invita al jazz, una música muy adecuada para apreciar mientras afuera llueve o caen las hojas. En la región hay dos importantes festivales de jazz: uno ya consagrado, el de Ciudad Lineal, que inicia con Sheilah Cuffy su cuarta edición; y otro que nace con vocación de futuro, el de Galapagar. Además, otras dos figuras del género, John Patitucci y Bill Evans, recalan en el tercer ciclo de músicas creativas y de raíz del San Juan Evangelista. Skunk Anansie, Baden Powell, Ozomatli, Las Hijas del Sol, Orishas o Pulgar son otras de las actuaciones de la semana.

- Jazz en Madrid. La británica Sheilah Cuffy es una madrileña más, pues en el foro ha desarrollado buena parte de su carrera. Colaboradora habitual en la banda de Javier Vargas, su voz personalísima sirve tanto para el blues como para el pop el jazz o el gospel. Le toca a ella abrir el IV Festival de Jazz de Ciudad Lineal donde un día después es el saxofonista valenciano Perico Sambeat el invitado. El encuentro de Ciudad Lineal se prolongará hasta el 19 de noviembre con importantes figuras como Bertrand Renaudin, Ángel Rubio o Iñaki Salvador, entre otros.El Teatro del Centro Cultural de Galapagar acoge su primer festival, que se inició el sábado con la Big Band del Conservatorio de Móstoles. El saxofonista puertorriqueño David Sánchez es la figura de esta semana. Obsesión se llama su último disco y es esta su única actuación en España dentro de su gira europea. Ben Sidran o Mark Isham pasarán también por Galapagar.

En el colegio mayor San Juan Evangelista se está celebrando el 3º Ciclo de Músicas Creativas y de Raíz, que se inició hace diez días con el flamenco de Los Cantes de Jerez y siguió con el blues de Red House. John Patitucci y Bill Evans son los que esta semana consagran el ciclo al jazz. Además, Red House repite actuación, pero en Clamores. Poniendo su guitarra al servicio de la música popular de Brasil con la improvisación del jazz, un grande como Baden Powell se deja caer en Suristán. Contar en un lugar tan pequeño con un artista de esta categoría es todo un lujo, pues su última actuación en Madrid fue en el verano del 1996 en el patio del Conde Duque, más alejado del público. Para el veterano guitarrista que tomó su nombre del fundador del movimiento Scout, samba y bossa son su terreno natural y ha sido compañero de grandes figuras de la música brasileña como Vinicius de Moraes o Antonio Carlos Jobim.

Dentro del jazz también, aunque con la mirada puesta en los ritmos afrocaribeños, se encuentra la música de la dominicana Xiomara Fortuna que esta semana vuelve al Suristán donde hace apenas 15 días dejó al personal boquiabierto.

Tiempos de fusión. El legendario bluesman americano Taj Mahal se ha unido al malinés Toumani Diabaté, uno de los máximos exponentes de la kora (una especie de arpa) y juntos ha elaborado el sorprendente disco Kulanjan, que ahora presentan en Madrid. Lo de estos dos monstruos es la conexión del blues americano con su propia raíz del oeste africano.

Lo del grupo californiano Ozomatli es la fusión entre el jazz, el reggae, el funky, la música hindú, el hip-hop y el punk. No en vano en sus filas militan japoneses, mexicanos, africanos y yanquis. Una mezcla explosiva con combativos textos rapeados en castellano.

Los ritos de santería cubana se unen con el rap en la propuesta de Orishas, una formación que vive entre Paris y Madrid. A lo cubano se llama su debú discográfico que vuelven a mostrar estos días. Las Hijas del Sol también se exponen a la fusión. En su último disco la música bubi de su etnia guineana se mezcla con el rap, el pop y el house y así se presentan dos días en El Café del Mercado.

- Rock, pop y canción. Por parte internacional, el rock más contundente viene de la mano de Skunk Anansie, un grupo con una cantante que da miedo. Metal Church o The Hellacopters son las otras dos actuaciones de fuera en las que el rock se pone al servicio de la furia. Por parte española, sirve el madrileño Quique González y Clan Club. Luis Pastor se entrega a la canción de autor, lo mismo que las cubana Liuba Maria y Anabell, la hermana de Silvio Rodríguez. El grupo La Sal es la demostración palpable de que la música celta ha llegado a todos los rincones. Eliseo Parra enseña tradición musical en el teatro de CCOO.

- Humor. La semana cuenta con dos acontecimientos extraordinarios dentro del humor. Por una lado, el inicio el jueves de una tanda de cuatro meses que tendrá a Faemino y Cansado en el Nuevo Apolo. Aunque lo suyo no es la música, gustan a tanta gente que a sus representaciones también van los que acuden a los conciertos de rock. Y, finalmente, mezclado con la música, humor grande es lo de los argentinos Les Luthiers. El sábado estrenan su espectáculo Bromato de Armonio, con el que estarán hasta diciembre con todas las entradas ya agotadas.