El ex diputado socialista García Sáez tiene vínculos empresariales con sectores de CDC

El ex diputado socialista Luis García Sáez, propietario de las empresas del grupo AGT, que obtuvo numerosas contratos de obras de ayuntamientos socialistas y actualmente es objeto de investigación judicial tras haber presentado suspensión de pagos, también mantiene una relación de negocios con empresarios del sector de Convergència Democràtica. La empresa AGT no sólo ha obtenido obras de gobiernos de izquierdas, sino también de otras administraciones, como la Generalitat y el Gobierno del PP.

Las vinculaciones del ex diputado socialista con sectores empresariales del ámbito de Convergència Democràtica (CDC) fueron directas en el caso de Agrotecsa -empresa del grupo AGT que pasó a denominarse AGT Construcciones de Espacios Verdes a partir del pasado mes de mayo-, de la que fue consejero Carles Sumarroca, fundador de Convergència. Sumarroca, cuyas empresas han obtenido numerosos contratos de obras y servicios del Gobierno catalán, fue presidente de la editora del desaparecido El Correo Catalán y mantuvo una estrecha relación con Lluís Prenafeta en la empresa de este último, Tippel. La vinculación de Carles Sumarroca con Agrotecsa se inició en febrero de 1993, cuando fue nombrado miembro del Consejo de Administración, y acabó un año más tarde, en febrero de 1994, según los datos del registro. Junto a Sumarroca, en las inscripciones registrales aparece Joan Tasias, gerente de Codema, firma de la que es accionista Sumarroca. Tasias explicó ayer a este diario que su presencia y la de Sumarroca en el Consejo de Administración de Agrotecsa fue circunstancial. Según su versión, tenían como objetivo conocer el funcionamiento de Agrotecsa con vistas a la compra de acciones. Tasias añadió que en aquellos momentos la empresa no tenía ningún tipo de problema.

El ex diputado socialista tiene también intereses en común con Lluís Renau, que fue director general de Seguridad Ciudadana del Gobierno de la Generalitat, en dos firmas ajenas al grupo AGT. Se trata de Immodarder e Iniciatives i Infrastructures, ambas dedicadas a la promoción y realización de proyectos urbanísticos.

Presidente y apoderado

En la primera de ellas, Immodarder, con sede en Granollers, García Sáez tuvo el cargo de presidente y apoderado, y Renau fue apoderado en una época y después consejero. Posteriormente Renau abandonó la firma, pero sigue manteniendo una participación en ella a través de Incema, una promotora inmbiliaria con sede en Barcelona. En el caso de Iniciatives i Infrastructures, el administrador era Luis García Sáez, y Renau fue miembro del Consejo de Administración.

Agrotecsa fue la adjudicataria del contrato de mantenimiento de la red de parques del área metropolitana. El concurso lo convocó la Mancomunidad de Municipios de Barcelona y se trataba de un contrato importante, al que se presentaron otras 17 empresas.

El contrato de mantenimiento debía tener una duración de cuatro años y expiraba en mayo del 2000. Un portavoz de la mancomunidad precisó ayer que el trabajo que realizaba Agrotecsa era correcto, pero que tuvo un final abrupto al producirse la suspensión de pagos.

La mancomunidad llegó a publicar un anuncio en el boletín oficial de la provincia como medio para comunicar la rescisión del contrato a Agrotecsa (en ese momento ya rebautizada como AGT), ya que no era posible encontrarla en las direcciones anteriores, por lo que pasó a ser considerada en paradero desconocido.

El presidente del Patronato de la Vivienda del Ayuntamiento de Barcelona, Eugeni Forradellas, de IC-V, criticó ayer con dureza la actitud del grupo municipal de Convergència i Unió (CiU), al que acusó de llevar a cabo una "caza de brujas". Forradellas atribuyó al portavoz de CiU, Josep Miró i Ardèvol, la voluntad de ensuciar el nombre del Ayuntamiento. Asimismo aseguró que Miró no es de fiar, como muestra su "trayectoria errática y camaleónica".