Demoledor análisis académico sobre el declive de la televisión británica

La disneyficación de la televisión británica ha provocado un "rápido declive" de calidad en una industria en la cual parece haberse impuesto la frivolidad a costa de las normas de calidad que la distinguieron en otro tiempo. Tal es el diagnóstico elaborado por expertos en comunicaciones y académicos de la universidad de Westminster consolida la impresión de lo que se ha venido en denominar el atontamiento de la televisión británica.Según el responsable de la investigación, Steven Barnett, lo que existe en la televisión es una crisis en cuanto a la cobertura de asuntos de actualidad. La política y las noticias económicas e internacionales pasan a segundo plano, para dar más espacio a tópicos domésticos o con más gancho comercial.

Tras entrevistar a 30 productores -bajo la condición de mantener su identidad en reserva- Barnett se declara asombrado "por el pesimismo y la frustración" que encontró a lo largo de su investigación. "La televisión en este país ha tenido un notable impacto por su contribución a la democracia, al entretenimiento y a la promoción de las artes creativas, pero nuestro estudio revela un cambio fundamental de prioridades que amenaza a aquella tradición", dijo.

La televisión comercial "prácticamente ha dejado la cobertura de noticias económicas e internacionales a la BBC", y "ésta muestra incertidumbre" sobre el modo de cumplir con ese cometido, observa el informe. El documento es un inventario del desasosiego de los viejos periodistas. El programa Tonight with Trevor McDonald, difundido por ITV ha sido descrito como una especie de paquete "que ofrece un poquito de Kosovo, pero con un embalaje (de noticias) sobre supuestas curas milagrosas, niños enfermos y seudo famosos".

Panorama, el informativo de la BBC1, aparece descrito como un producto selectivo. "A menos que resulte inevitable, ya no nos ocupamos de Irlanda del Norte. Nos decimos: la gente ya no quiere saber nada de Irlanda del Norte", observó otro entrevistado.