Condenado por causar la muerte de un amigo al darle una granada

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a tres años de prisión al guardia civil Julián María B. N. por entregar una granada de mortero cargada a un amigo y causarle la muerte cuando ésta explotó. El tribunal considera probado que el día 28 de mayo de 1995 el procesado acudió a su domicilio en Getafe en compañía de tres amigos. Allí les mostró diversas armas, munición y explosivos de su propiedad. Después, entregó a Bernardo Muñoz una granada de mortero con la espolerta cargada y en perfecto estado, sin advertir nada.La resolución explica que la victima manipuló el explosivo, que acabó estallando y le causó la muerte. A los otros dos acompañantes, la explosión de la granada les causó heridas leves. El guardia civil también ha sido condenado a indemnizar con 20 millones de pesetas a la familia del fallecido.