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FÚTBOL: Séptima jornada de Liga

El Mallorca empata al límite

El Deportivo se adelantó con dos goles y fue superior, pero terminó empatando

MALLORCA 2 - DEPORTIVO 2El coraje salvó del desastre al Mallorca ante el Deportivo. A diez minutos del final, los gallegos ganaban cómodamente por 0-2, con tantos marcados por Pauleta. El equipo balear se olvidó de los sistemas y apeló a la garra y al pundonor. Fue suficiente. Quinteros y Stankovic, de penalti en el minuto 92, evitaron la derrota.Vázquez tiene dudas y las transmite al equipo. El técnico gallego no sabe por dónde hincarle el diente a la herencia que recibió de su colega argentino Mario Gómez hace poco más de un mes. Venía jugando con un solo delantero (Carlos) en las últimas jornadas, en una evidente demostración de su falta de fe en las posibilidades del Mallorca. Ante el Deportivo volvió al sistema tradicional (4-4-2) que encumbró a Héctor Cúper, y Carlos tuvo el acompañamiento de Diego Tristán. Pero el asunto tampoco funcionó.

Mallorca: Burgos; Olaizola, Siviero, Nadal, Miquel Soler; Lauren, Serrizuela (Ibagaza, m

53), Francisco Soler (Quinteros, m.76), Stankovic; Carlos (Luis Carreras, m. 46) y Diego Tristán.Deportivo: Songo"o; Manuel Pablo, César (Schurrer, m.67), Naybet, Romero; Víctor (Donato, m. 83), Flavio, Mauro Silva, Fernando; Djalminha (Jokanovic, m.65) y Pauleta. Goles: 0-1. M. 48: Pauleta bate por bajo a Burgos. 1-1. M. 67: Pauleta, de cabeza tras un centro por la izquierda de Romero. 2-1. M.80. Quinteros, a la media vuelta. 2-2. M. 90. Stankovic, de penalti. Árbitro: Daudén Ibañez. Expulsó a Schurrer (m.90), en la jugada del penalti del empate del Mallorca. Mostró tarjeta amarilla a Fernando, Manuel Pablo, Carlos, Diego y Olaizola. Partido de la séptima jornada de Liga disputado en el estadio Son Moix ante unos 15.000 espectadores.

Parecía muy a gusto el conjunto de Irureta haciendo daño y minando la resistencia psicológica del rival, sin hacer sangre del todo. Tanta superioridad sobre el terreno de juego sacó de las casillas al público, poco acostumbrado en los últimos años a soportar una inferioridad tan rotunda. Ausente el conductor del juego balear, Engonga, el Mallorca no encontró a ningún futbolista que le sacara del atolladero e hincó la rodilla.

Vázquez quiso parar la hemorragia en la reanudación, con su receta tradicional: sacó a un delantero (Carlos) por un mediocampista (Luis Carreras). Volvió a contar con un solo atacante, en un manifiesto reconocimiento a la superioridad visitante, y Pauleta marcó en dos ocasiones.

La pesadilla nocturna del Mallorca se hizo patente. Con dos goles en contra y un solo punta, Vázquez dio entrada a Ibagaza y Quinteros. Aunque algo tarde, el equipo esbozó una recuperación. El gol de Quinteros volvió a colocar al Mallorca en el partido y a su afición apoyando como en los viejos tiempos. La química volvió a funcionar en Son Moix y el penalti fue el colofón a su esfuerzo.

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