Pasqual Maragall pide un último esfuerzo a sus seguidores para lograr el triunfo electoral El candidato socialista afirma que el líder de CiU volverá a presentarse si gana

Cada día de esta esta semana vale como cada semana del último año, explicaba ayer Pasqual Maragall a sus seguidores en Vilafranca del Penedès y en Granollers, para pedirles el esfuerzo para el último tramo de la campaña electoral. El triunfo está tan cerca, les decía, que se puede tocar con la punta de los dedos, pero no está conseguido, y para alcanzarlo, dijo, "necesitamos que cada uno de los presentes consiga cinco votos". Si el día 17 no llega la victoria del cambio, advirtió, Pujol se pasará cuatro años pensando si se presenta de nuevo en el año 2003. El candidato del PSC a la presidencia de la Generalitat dijo que Pujol no tiene credibilidad cuando afirma que no pactará con el PP.

"La tramontana ya se ha llevado las telarañas y ha aclarado el cielo; ahora necesitamos el huracán que se lleve estos 19 años de conformismo", dijo Maragall con esa facilidad que tiene para expresarse mediante metáforas. Las 500 personas que asistían a un almuerzo electoral en el pabellón del Congost, en Granollers, aplaudían entusiásticamente. "El día 17 comienza para Cataluña el siglo XXI", añadió, "y la mejor inversión de futuro para Cataluña no es el continuismo, sino el cambio". Pero no por estar sumergido permanentemente en el fervor de sus seguidores Maragall se deja a llevar por la euforia, y ayer dedicó la jornada a advertir reiteradamente de que, si pueden, Pujol y el PP pactarán a partir del día 17 como han pactado en la legislatura pasada tanto para sostener al Gobierno de Aznar como para formar mayoría en el Parlament. Y a advertir también de que una nueva victoria de Pujol supondría tener a Cataluña entretenida otros cuatro años en las discusiones sobre la sucesión del líder nacionalista. "Serían cuatro años más para discutir qué caramba pasará en el futuro: quién será el número uno, quién el número dos", dijo, "y todo esto dirigido por una persona que ya ha dicho que no quiere volver a presentarse, pero que si ahora gana no haría después otra cosa que pensar si se presenta de nuevo en el 2003".

Ésta no es, desde luego, la expectativa que ansían los asistentes a los actos electorales de Maragall. Y el candidato insistió ante ellos en que el país no necesita cuatro años que sean la continuación agónica de los 19 años de gobierno de Pujol. "Lo que Cataluña necesita es un nuevo empuje", proclamó. Esto será posible, afirmó, si el día 17 la candidatura que preconiza el cambio obtiene "una victoria clara, limpia, redonda, que no admita dudas".

El papel de ERC

Los socialistas se están convenciendo estos días de que si los resultados electorales permiten combinaciones continuistas, sea con el PP o con Esquerra Republicana (ERC), Pujol permanecerá cuatro años más como presidente de la Generalitat. Por eso Maragall recordó ayer que CiU aseguró durante la campaña de las últimas elecciones legislativas que "plantaría cara" al PP. "Pero al cabo de tres días se fueron al Majestic y pactaron, según ellos, el mejor acuerdo que se había hecho sobre el IRPF, que luego no ha dado más que 6.000 millones en cuatro años".

Y fue también por esto por lo que Joaquim Nadal, el candidato número dos en la lista de Maragall, acusó a Pujol de realizar "una proposición grotesca desde su posición de debilidad" cuando pide al mismo tiempo el voto de los electores que habitualmente apoyan al PP y el de los que se inclinan por ERC, informa Manuel Torres.

En un acto político celebrado en Sant Joan Despí (Baix Llobregat), Nadal criticó también la política de equidistancia de Esquerra Republicana, quecalificó de "clara apuesta" por la derecha. "Si continúa la indefinición de Carod Rovira, los votantes de ERC tienen que saber que votar a este partido es prolongar la agonía de los gobiernos de Pujol", señaló.