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Entrevista:

"El Departamento de Medio Ambiente de la Generalitat es sólo maquillaje"

Pregunta. ¿Por qué, después de tantos años de alianzas electorales, Els Verds se presenta ahora en solitario a las elecciones?Respuesta. Ya tocaba. Hace seis años que nos constituimos y ha llegado el momento de que empecemos a llegar a las instituciones por nosotros mismos y no de la mano de otros partidos.

P. Hace un mes no argumentaban así. Incluso anunciaron un acuerdo con Pasqual Maragall.

R. Siempre es difícil pasar de la adolescencia a la etapa adulta, y lo nuestro va un poco por aquí. Nos debatíamos entre dar el paso e ir en solitario o bien sumar con otras fuerzas porque valía la pena ante el escenario político de estas elecciones. Al final, llegamos a un compromiso: agotar las posibilidades de ir con dignidad junto a otra fuerza y, si no era posible, acudir en solitario.

P. ¿Por qué no cuajó el pacto con Maragall?

R. Posiblemente abrimos las negociaciones demasiado tarde y empezamos la casa por el tejado. Queríamos hablar de programa, lo que para ellos parecía secundario, y al mismo tiempo hablábamos de listas. Al final, ni se concretaba el programa ni nos satisfizo el lugar que se nos ofrecía.

P. En cuatro años han ido a unas elecciones con IC, con ERC, con EUiA, a punto han estado de coligarse con el PSC y al final van en solitario. ¿No es un síntoma de que Els Verds no es todavía un partido maduro?

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R. Pienso que un signo claro de nuestra madurez es que al final hemos tomado la decisión que teníamos que tomar: ir solos.

P. ¿Quién puede ser más sensible a sus reivindicaciones, Jordi Pujol o Pasqual Maragall?

R. Pujol no es que sea sensible o deje de serlo. Él ha desarrollado una política y parece que no escuche a los demás. Las izquierdas parece que puedan ser más sensibles, pero la verdad es que en el proceso de negociación con nosotros no lo han demostrado.

P. Pero si tuvieran que decidir, ¿a quién harían presidente?

R. Dudo mucho que pudiéramos entendernos con Pujol, y Maragall tendría que aceptar nuestras propuestas para conseguir que lo apoyáramos en la investidura. No nos importa estar en la oposición.

P. En cualquier caso, es muy difícil que Els Verds superen el 3%. ¿No es un voto perdido?

R. No lo es para las personas que hasta ahora no habían tenido la posibilidad de votar a una fuerza joven, con futuro. Hay un sector abstencionista importantísimo; mucha gente pasa de política. Tratamos de darles la ilusión para que se acerquen a nosotros y nos permitan llegar al 3%.

P. Pujol fue de los primeros en crear un Departamento de Medio Ambiente. ¿No fue un avance?

R. Responde sólo a una política de maquillaje. Si haces un Departamento de Medio Ambiente y le asignas el 0,5% del presupuesto, si algo tan esencial como la gestión del medio natural depende de Agricultura, si el desarrollo de las energías renovables se asigna a Industria... En fin, es un departamento de cara a la galería.

P. ¿Qué les distingue de otros partidos verdes, como Els Verds-Alternativa Verda o de la propia Iniciativa per Catalunya-Verds?

R. En Alternativa Verda hay verdes, pero en estos momentos no encuentran la dirección. Quisieron ir con IC, pero al final, en aplicación de aquella frase clásica de Roma no paga traidores, se los quitaron de encima y ahora han tenido que constituir un grupúsculo. Ya volverán a la casa común, que es Els Verds-CEC. En cuanto a IC, no es verde. Es un partido que en la transición desempeñó un papel muy importante y fue el referente de muchos de nosotros. Debe volver a su espacio natural.

P. ¿Cuáles son las prioridades que Cataluña debe afrontar en la próxima legislatura?

R. Es básico abrir la Administración a los ciudadanos y elaborar un plan energético propio, basado en las energías renovables. Otro punto prioritario es la democracia ambiental.

P. ¿Las medidas que propone son un freno para el desarrollo y el crecimiento económico?

R. ¡Es que no nos podemos pasar toda la santa vida creciendo! Siempre pongo un ejemplo muy claro: las personas crecemos hasta una altura determinada, pero una vez alcanzada seguimos desarrollándonos, vamos consiguiendo el máximo de nuestras posibilidades. Hay que distinguir entre crecer y desarrollarse. Cataluña no puede crecer, pero debe haber un reequilibrio en el territorio.

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