El Gobierno español anula la orden de Garzón de recurrir si el fallo favorece a Pinochet

El Gobierno de José María Aznar solicitó ayer a la Fiscalía británica que deje sin efecto la orden cursada por el juez Baltasar Garzón el día 1, para que la citada fiscalía -que actúa como abogado de España-, recurra el fallo que anunciará el magistrado Ronald Bartle el viernes, si el mismo es favorable al ex general Augusto Pinochet y rechaza su extradición a España. Dos miembros del servicio diplomático español transmitieron verbalmente a la Fiscalía que hasta nuevas instrucciones del Gobierno español se abstenga de presentar recursos, ya que la orden del juez Garzón carece de validez.

La decisión final del magistrado Bartle es recurrible ante el Alto Tribunal de Justicia británico y, en última instancia, ante la Cámara de los Lores por cualquiera de las dos partes: España y por los abogados de Pinochet.Los funcionarios Miguel Aguirre de Cárcer, subdirector del gabinete técnico de la secretaría del Ministerio de Exteriores, y Carmen de la Peña, de la Embajada española en Londres, visitaron ayer las oficinas del Servicio de Fiscalía de la Corona (que ejerce la defensa de los intereses judiciales de España). Según fuentes solventes, ambos mantuvieron una reunión con un representante de la citada institución. El motivo: trasladar la posición del Ejecutivo español sobre si es necesario o no presentar un recurso ante la sentencia que el magistrado Ronald Bartle anunciará el viernes día 8 respecto a la petición de extradición de Pinochet a España.

Ambos funcionarios solicitaron a la Fiscalía de la Corona británica que se abstenga de presentar un recurso contra una eventual decisión favorable a Pinochet -esto es, si el magistrado rechaza la extradición-, hasta que se cursen las órdenes correspondientes desde Madrid.

La Fiscalía de la Corona informó a los dos representantes del Ejecutivo español que el juez Baltasar Garzón ya envió una carta el pasado viernes, día 1 de octubre, en la que señala que la Fiscalía debe ejercitar el derecho a recurrir el fallo en caso de que éste sea adverso a España; es decir, que rechace la demanda de extradición del ex dictador.

Los representantes españoles expresaron verbalmente- según confirmaron anoche fuentes consultadas por este periódico-, que dicha orden del juez de la Audiencia Nacional carecía de validez y que las instrucciones las daría el Ejecutivo español.

La Fiscalía de la Corona propuso entonces que si no había una contraorden posterior procedente del Ejecutivo español, se anunciaría la apelación en el caso de que el magistrado Bartle fallase a favor de Pinochet. Los representantes españoles dijeron que la Fiscalía británica no debería actuar en ningún sentido hasta no recibir instrucciones oficiales del Ejecutivo español.

Esperar al fallo

Fuentes del Ministerio de Exteriores consultadas anoche por EL PAÍS señalaron que existen informes internos en dicho departamento sobre las posibilidades abiertas tras el fallo del magistrado de extradición, el próximo viernes. Sin embargo, esas fuentes añadieron que preferían esperar al fallo del próximo viernes antes de pronunciarse sobre los recursos de apelación.El juez Garzón cursó instrucciones el pasado viernes 1 de octubre tras ser informado oficialmente por la Fiscalía de la Corona de que el juicio de extradición había concluido el jueves 30 y que se anunciaría el veredicto el viernes 8 de octubre.

Si el magistrado encargado de la extradición, al dar a conocer su sentencia, fallara en favor de las tesis de la defensa de Pinochet, le descarga de forma automática de las acusaciones y, por lo tanto, debe dejarle en libertad, lo que permitiría al ex dictador regresar a Chile inmediatamente. Sólo el anuncio de que el fallo de Bartle será recurrido paraliza la ejecución de la sentencia para que la apelación sea oída por el Alto Tribunal de Justicia. En este caso el mecanismo judicial impide a Pinochet el regreso a Chile hasta que se resuelva la apelación en esa instacia superior. Esta situación se repetiría una vez que se pronuncie el Alto Tribunal de Justicia, pues cabe un nuevo recurso ante la Cámara de los Lores.

Fuentes judiciales consultadas ayer dijeron que en los procedimientos de extradición, la Fiscalía de los países a los que se requiere la entrega de una persona suele recurrir inmediatamente contra un fallo denegatorio, y que dicho recurso no suele ser objeto de ninguna decisión o deliberación por parte del Ejecutivo del afectado (en este caso el Gobierno español).

Los antecedentes

En el mismo caso Pinochet, por otra parte, ya hay un antecedente de recursos. El 28 de octubre de 1998, el Alto Tribunal de Justicia británico falló a favor de Pinochet, concediéndole la inmunidad total, pero permitió un recurso ante la Cámara de los los Lores (Tribunal Supremo). Precisamente, el juez Garzón, sin interferencias del Ejecutivo español, cursó instrucciones a la Fiscalía de la Corona británica para recurrir ante los jueces lores, quienes finalmente anularon la sentencia del Alto Tribunal de Justicia y abrieron paso al procedimiento de extradición del ex dictador.Una decisión de no presentar recurso por parte del Gobierno español supondría forzar una salida equivalente a desistir de la demanda de extradición amparada en una decisión del magistrado británico. Con todo, se desconoce cuál puede ser el sentido del fallo que anunciará el magistrado Bartle el próximo viernes.