Chaves afirma en Rabat que "habrá que buscar un empate" en la relación con Marruecos

"No se puede pretender ganar por 10 a 0, habrá que buscar un empate o ganar por la mínima". Con este símil futbolístico, el presidente de la Junta, Manuel Chaves, describió ayer lo que debe ser una relación agrícola y pesquera equilibrada con Marruecos, país que tiene en vilo a la flota andaluza (2.000 empleos directos y 10.000 indirectos) por su negativa a renovar el tratado de pesca con la U E, cuya vigencia termina el 30 de noviembre. En su quinta visita oficial, Chaves volvió a reclamar en Rabat un trato especial. "No habrá renovación del acuerdo, ya que pertenece a una generación antigua y con una concepción arcaica en materia de cooperación", respondió el ministro de Pesca marroquí, Habib Malki.

Pocas novedades hubo en la entrevista de una hora entre Chaves y Malki sobre el conflicto de la pesca, pero sí las hubo en el terreno de la cooperación. El presidente andaluz insistió en la compatibilidad de las flotas marroquí y andaluza, dado el carácter semiindustrial y artesanal de esta última, por lo que pidió "que sea tenida en cuenta" en la negociación con la UE. Malki, que se fue por los cerros de Úbeda cuando se le preguntó si condicionaba el nuevo tratado a un incremento de las cuotas de ventas agrícolas a la Unión, dejó claro una vez más la posición de su país: una renovación basada en criterios colonialistas y "arcaicos" de cooperación es imposible.El mensaje que transmitió Chaves ante Malki y el ministro de Asuntos Exteriores, Mohamed Benaissa, con el que cenó anoche, es que el "problema" de la pesca forma parte de un todo y que la relación con Marruecos debe abarcar un campo mucho más amplio. Chaves insistió en la necesidad de hablar "de todos los temas" y a partir de ahí buscar un punto de equilibrio para "conciliar intereses recíprocos".

Dificultades

Las dificultades surgen cuando desde Andalucía se pide a Marruecos un trato preferente para sus barcos, pero no se quiere ceder cuando los marroquíes reclaman lo mismo para colocar más frutas y hortalizas en los mercados europeos, que compiten directamente con las que produce el campo almeriense. ¿Cómo se conjuga este cruce de demandas? Chaves respondió: "No se puede pretender ganar el partido 10 a 0, habrá que buscar un empate o ganar por la mínima. En el contexto de la relación con Marruecos no sólo está la pesca o la agricultura".

El presidente andaluz ofreció a Benaissa, quien propuso crear un consulado general de Marruecos en Sevilla, un nuevo marco de cooperación ya que el actual finaliza en el año 2000. El futuro acuerdo tendría una vigencia de seis años, con unos objetivos muy claros dentro de un programa operativo. En la actualidad, la Junta, que actúa preferentemente en provincias del norte de Marruecos, trabaja en los sectores de energía (electrificación solar de aldeas rurales), programas de formación de funcionarios de administraciones locales, rehabilitación de espacios públicos (en Tetuán y Chaouen), en fomento del autoempleo (con la creación de una escuela de empresas en Tánger), salud (equipamiento de hospitales), medio ambiente (con la redacción de planes para la conservación de recursos naturales), cooperación universitaria, cultural (con cesión de becas), agricultura (desarrollo oleícola en Taza) y pesca. La financiación de este programa (la mayoría con recursos propios) consume unos 1.000 millones de pesetas.

Lo que se trataría ahora es que el nuevo marco de cooperación cuente con financiación de los fondos Meda, destinados por la UE al desarrollo de la orilla meridional del Mediterráneo, aunque éstos se distribuyen desde Bruselas. En todos los foros regionales europeos a los que asiste, Chaves y otros presidentes han pedido la descentralización de este dinero para que los programas sean más efectivos y los países destinatarios se beneficien. De hecho, Marruecos debía haber recibido en la segunda mitad de esta década 83.000 millones de pesetas de los fondos Meda, pero tan sólo le han llegado 29.950 millones.

Chaves, que se también entrevistó con el consejero real y miembro de la Fundación de las Tres Cultural, Andre Azoulay, celebrará hoy un encuentro con el primer ministro, Abderraman Yussufi. La audiencia con el rey Mohamed VI, quien ayer se encontraba en Marraquech, no está cerrada.