Una oficina de la Junta vigilará el desarrollo turístico del litoral gaditano

La Junta de Andalucía va a crear una oficina de gestión y seguimiento del litoral de Cádiz, un órgano en el que participarán las consejerías de Presidencia, Medio Ambiente y Obras Públicas y Transportes. El objetivo es planificar el futuro desarrollo de casi 120 kilómetros de costa que, en su mayor parte, se encuentran en estado semivirgen. El consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías -que mantuvo ayer una reunión en Cádiz con el consejero de Medio Ambiente, José Luis Blanco, representantes de Obras Públicas y dirigentes regionales y provinciales del PSOE- explicó que la Junta defiende un turismo basado en un modelo sostenible. "Consiste en poner pie en pared a lo que se está convirtiendo en actuaciones que sólo persiguen un claro interés especulativo", dijo Zarrías, quien recordó: "Estamos en la etapa final de la convergencia de la moneda única (...) y eso está haciendo que haya un movimiento de dinero que no puede cercenar lo que es, desde el punto de vista social y económico, el futuro sostenible de la provincia de Cádiz". Zarrías no quiso ayer ofrecer "nombres y apellidos" de los promotores o los ayuntamientos que más preocupan a la Junta, entre los que se pueden encontrar los correspondientes a Tarifa y Barbate. Blanco se refirió a otras actuaciones como la de Roche-Rosam (el proyecto sobre suelo de San Fernando que quede libre de servidumbres militares), Bolonia-Lentiscal o Los Caños de Meca y Zahora. En estos casos, el consejero defendió la necesidad de garantizar los servicios adecuados, las comunicaciones necesarias y los mecanismos de depuración legales. "A un determinado capital le interesa la recalificación urbanística, ocupar toda la costa", añadió Blanco. La Junta, que llamará a los ayuntamientos a coordinarse a través de la Oficina de seguimiento, considera que existe planificación suficiente para evitar "la depredación urbanística", pero aún así, revisará los planes de gestión de los zonas protegidas.