El Gobierno admite que la policía de Málaga no puede con la ola de crímenes
El delegado del Gobierno en Andalucía, José Torres Hurtado, reconoció ayer que la ola de crímenes que se suceden en los últimos tiempos en Málaga sobrepasa la capacidad de la policía en la zona. Según sus propias palabras, las fuerzas de seguridad están "desbordadas" ante la situación. El Ministerio del Interior ya ha elaborado un borrador con su estrategia para darle la vuelta a la situación, en el que se incluye el envío de agentes verdaderamente especializados en la lucha contra criminales organizados.
En Málaga hay en este momento una plantilla de policías y guardias civiles que oscila entre las 3.900 y las 4.300 personas, de las que unas 400 se dedican a tareas de investigación. De ellas, 200 pertenecen a la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco), 153 son efectivos de la Policía Judicial -100 policías y 53 guardias civiles-. También hay 18 agentes del instituto armado en tareas de información y 34 destinados a la lucha contra el delito fiscal, que incluye narcotráfico y drogas. La estrategia del Gobierno frente a la oleada de crímenes que se vienen sucediendo en Málaga no busca aumentar espectacularmente estos efectivos. Quizá se aumenten en 30, 40 o 50 personas. Lo que sí está decidido es que será personal altamente especializado en informática, análisis, delitos económicos, e idiomas. "En la costa operan bandas rusas, francesas, chechenas, kosovares, alemanas y de otros muchos países. Esto nos obliga a tener personal que domine estas lenguas para llevar las investigaciones", declaró el subdelegado del Gobierno en Málaga, Carlos Rubio. El carácter internacional de los delincuentes que operan en la costa malagueña queda patente con las visitas de agentes de enlace de las policías de los distintos países de la Unión Europea para seguir la pista de algunas de sus investigaciones. La visita del secretario de Estado para la Seguridad, Ricardo Martí Fluxá, a Málaga estaba prevista para la semana que viene, aunque depende de su agenda y también de la rapidez con la que los cuerpos policiales de Málaga ultimen sus informes y peticiones para el representante de Interior. "La policía ya ha reforzado sus efectivos desde que este verano empezaron los asesinatos en serie", asegura Rubio. Los crímenes ocurridos este verano en Málaga se dividen, según el subdelegado, en dos grupos: "Aquellos que se pueden dar en cualquier gran ciudad española, de ajustes de cuentas de pequeños traficantes, como parece haber sido el triple asesinato del martes en el Puerto de la Torre, y crímenes que claramente parecen relacionados con actividades de bandas internacionales de corte mafioso, y esos ocurren específicamente en la Costa del Sol". Rubio incluye en este capítulo los asesinatos ocurridos en Mijas (dos muertos), Algeciras (una víctima mortal), Marbella (otras dos víctimas) y el asalto al furgón del aeropuerto de Málaga (un botín de 537 millones de pesetas). Reunión previa Por su parte, El delegado del Gobierno en Andalucía afirmaba ayer que ya "ha habido una reunión en Málaga del subdirector general operativo de la Policía, Pedro Diaz-Pintado, y el jefe superior de Andalucía Oriental, Enrique de Federico, con el comisario general de la Policía Judicial, Jesús Espigares, y los mandos provinciales en la que se preparó un borrador para intensificar la vigilancia policial". Torres Hurtado añadió que: "Tenemos muy buenos investigadores en Málaga, ahora lo que queremos es intensificar la prevención". El delegado del Gobierno confirmó que la situación en la Costa del Sol "preocupa al Gobierno, que se ha marcado como una prioridad mejorar los medios y especializar al personal". Por el momento, se apuesta en mejorar la calidad antes que la cantidad.
