Las 35 horas generan en Francia 122.103 empleos, según el Gobierno

Los acuerdos para la aplicación de la semana laboral de 35 horas suscritos en las empresas francesas han permitido crear o conservar hasta ahora un total de 122.103 puestos de trabajo, según el informe presentado ayer por la ministra de Empleo y Solidaridad, Martine Aubry. A dos semanas del debate parlamentario que debe sancionar el segundo y definitivo proyecto de ley de reducción del tiempo de trabajo, el informe permite al Gobierno presentar un resultado muy positivo.De acuerdo con el informe, encargado a organismos mayoritariamente dependientes de la Administración, más de dos millones de trabajadores aplican ya la reducción del tiempo de trabajo, de conformidad con los 15.558 acuerdos de empresa firmados. Las empresas de más de 20 trabajadores, que todavía no han suscrito el acuerdo, suman 6,3 millones de empleados.

La semana de 35 horas que entrará en vigor el uno de enero próximo para esas compañías -el 2001, para las de menos de 20 asalariados- contempla cuantiosos incentivos a las empresas que la apliquen. Estas ayudas obligarán al Gobierno francés a un desembolso descomunal de 120.000 millones de francos (tres billones de pesetas).

La guerra de cifras está servida y el optimismo gubernamental chocará con el escepticismo de la derecha y de quienes consideran que el aparente efecto de la reducción del tiempo de trabajo se debe al mero crecimiento económico.

Con todo, la publicación del informe permitió a Martine Aubry dar por obtenidos "los objetivos mayores". La ministra descompuso los datos indicando que los empleos previstos, comprometidos en los acuerdos de empresa firmados, ascienden a 102.646 (30.000 de ellos ya se han materializado), mientras que los condenados a desaparecer y ahora preservados, otro de los terrenos propicios a la suspicacia, suman 17.627. Los creados por las administraciones públicas se elevan a 18.000. "El balance es globalmente positivo", insistió.