JOSEFINA ALDECOA ESCRITORA "La memoria de la posguerra se ha recuperado en los noventa"

Escritora y educadora, Josefina Aldecoa mantiene vivo los presupuestos que han movido su carrera como docente y novelista, siempre al amparo de una generación, la realista de los años cincuenta, que ella misma bautizó como "los niños de la guerra" y de la que surgen lo que considera el germen de la literatura femenina actual. Aldecoa habló ayer sobre educación sentimental de hombres y mujeres, reminiscencia de su próxima novela, en Baeza, sede de la Universidad Internacional de Andalucía, que acoge el curso Mujer y Literatura. Pregunta. ¿Qué visión tiene del panorama literario actual? Respuesta. Estamos en un momento de bastante brillantez. Hay muchos escritores publicando y muchas editoriales y en esto, como pasa siempre, habrá una criba, pero lo más interesante es que conviven varias generaciones, los más jóvenes, la generación intermedia de entre 40 y 50 años, y muchos de la generación de los cincuenta como Bonald, Ferlosio... Ha habido muchos muertos en esta generación, pero los supervivientes siguen escribiendo con ímpetu. P. ¿Qué opinión le merece esta nueva hornada de escritores jóvenes? R. Están haciendo un tipo de novela testimonial, testimonio de su tiempo, cuando la nuestra era más un reflejo sociopolítico. Es normal que ellos hablen de la sociedad, la droga, el desarraigo. P. ¿Reflejan tan bien la realidad los escritores actuales como la de los 50? R. Hay de todo. Es un fenómeno raro que en los cincuenta surja un grupo tan grande de novelistas, pero hay que pensar que en estos momentos la literatura era la única salida expresiva para los jóvenes. Dadas las circunstancias del país, se escribía por dar testimonio de lo que veíamos, que era más bien triste y que no se podía decir en la prensa. Mi generación estuvo marcada porque vivimos la guerra durante la infancia. Ahora se empieza a recuperar la memoria, tras un periodo de ofuscación que supuso la transición. P. ¿Por escribir en esa época sufrió el machismo? R. Las mujeres de mi generación, Ana María Matute, Soledad Puértolas o yo misma, no tuvimos problemas de machismo. La primera que publicó de todo el grupo fue la propia Ana María. Tengo que decir que los cincuenta marcó la entrada de la mujer en la Literatura, no aislada ni individual a lo Pardo Bazán. La dificultad era la misma. P. ¿El actual sistema educativo estimula lo suficiente la lectura? R. Nací con la radio, mi hija con la televisión y los niños de ahora con Internet, de forma que hay que saber entender que la lectura no sea el único recurso. En la escuela, lo que sea letras no interesa, se priman las matemáticas. P. ¿Prepara alguna novela? R. Sí. Es un proyecto que analiza la educación sentimental y sus diferencias entre hombres y mujeres. De momento, la he llamado El Enigma.