El Consorcio bombea agua del río Indusi para evitar restricciones a 7.000 personas en Arratia Caseríos y explotaciones agrícolas han precisado abastecimiento con camiones cisterna

VIENE DE LA PÁGINA 1 El aislamiento en que se encuentran estos caseríos de Aia y Getaria, en plena montaña y con una accesibilidad muy difícil, les condena a permanecer apartados de la red municipal, pese a los esfuerzos realizados por la Diputación guipuzcoana por incorporar a las redes de abastecimiento las pequeñas explotaciones agrícolas y ganaderas. Éstas requieren de mucha agua para su funcionamiento y se ven obligadas a obtenerla de fuentes naturales y depósitos propios. El alcalde de Aia, Juan Carlos Zuloaga, asegura que los principales problemas se han sucedido en los barrios Elkano y Ubegun, en Aia, y en el de Eitzaga, en Getaria, donde viven casi 200 personas que se sirven de manantiales y de acuíferos que no están incluidos en la red. A estos lugares han tenido que acudir varias dotaciones de bomberos durante las últimas semanas para proporcionarles el agua que necesitan. En 73 intervenciones practicadas, el parque de bomberos de Zarautz ha transportado a estos caseríos 357.000 litros de agua. "No son servicios regulares, pues nosotros atendemos lo que por medios ordinarios no se puede lograr", explica Ángel Irastorza, del departamento de Presidencia de la Diputación de Guipúzcoa. Otros caseríos que han padecido una situación similar a causa de la sequía, pero con mejores accesos, han recurrido a la ayuda del Ayuntamiento para recibir agua, que les ha llegado transportada en camiones cisterna que habitualmente se dedican a almacenar la leche que se produce en estas viviendas rurales. La actuación de los bomberos, asegura Irastorza, se debe al carácter especial de las situaciones originadas por la sequía, que ha requerido de una "actuación profesionalizada en casos de cierta emergencia". En Vizcaya, el alarmante descenso del caudal del río Arratia, cuya corriente atraviesa los municipios vizcaínos de Igorre, Arantzazu, Artea y Lemona (unos 7.000 habitantes en total), puso en peligro el abastecimiento de agua de numerosas personas. Ante el riesgo de que se quedaran sin agua en sus casas, el Consorcio de Aguas Bilbao-Bizkaia actuó enseguida y solucionó el problema mediante un sistema de bombeo colocado en el río Indusi. Veraneantes De esta manera se logró que la depuradora de San Cristóbal recuperase parte de su capacidad de almacenamiento y se erradicara la escasez de agua. No obstante, esta solución provisional no podría aguantar así si continúa sin llover. En ese caso, los ayuntamientos y los responsables del consorcio ya han previsto adoptar otras medidas para neutralizar la carencia de agua. En el caso de Álava, las restricciones de agua se han localizado en varias localidades de la zona de Valdegovia, donde se halla el parque natural de Valderejo, que en la temporada estival atrae a numerosos visitantes del exterior. Este afluencia masiva de foráneos, que han incrementado el consumo, unido a las deficiencias existentes en las infraestructuras que facilitan el suministro de agua, han provocado la aparición de problemas, ya subsanados, en la comarca de los Valles Alaveses, en el límite de Álava con la provincia de Burgos.