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Firme apuesta empresarial

Si ahora se habla de AVE Madrid-Valencia, y hasta parece que los que más hablan de él son los que han de construirlo, en gran parte se debe a la firme apuesta que por el tren hicieron los empresarios valencianos. La creación hace dos años desde la Asociación Valenciana de Empresarios (también con la siglas AVE, pero menos rápida) de una asociación para impulsar su construcción, denominada Fundación Pro AVE, pareció en un principio inocua. Sin embargo, en julio de 1998, la plana mayor del empresariado valenciano (cámaras de comercio, patronales y grandes empresarios) reunió a los medios para lanzar un órdago al Gobierno. El proyecto es "irrenunciable" para la Comunidad Valenciana, dijeron. Pero además es rentable (nueve millones de viajeros potenciales) y financiable. Hasta se ofrecieron para poner dinero. Sólo han puesto unas condiciones: que el tiempo de viaje sea inferior a las dos horas, que se acabe en el 2003 y que articule toda la Comunidad Valenciana. Por eso su clara apuesta ha sido la opción centro. Ahora, el presidente de la fundación, Federico Félix, también presidente de la Federación Agroalimentaria, no quiere hablar de trazados. Tiene palabras de agradecimiento para el Consell por su apoyo, pero exige que las obras comiencen en el 2000. "La nuestra no es una posición inamovible", asegura, y está dispuesto a oír las ventajas de cualquier otro trazado. De la utopía, al trazado Por su parte, el presidente del Consejo de Cámaras de Comercio de la Comunidad Valenciana, Arturo Virosque, subrayó que su prioridad es que el AVE se realice lo antes posible. "Hace cuatro o cinco años nadie pensaba en que podíamos tener un tren de alta velocidad y hoy estamos debatiendo el trazado y la financiación", declaró el dirigente cameral. Virosque, también presidente de la Cámara de Comercio de Valencia, declinó pronunciarse a cerca del futuro trazado del AVE. "El consejo no tiene ningún estudio de viabilidad del Ministerio de Fomento sobre el trazado definitivo para poder pronunciarse. Lo único que tenemos es a algunos señores que han hecho estudios parciales", declaró Virosque, quien insiste en que lo prioritario es reducir el tiempo de trayecto con Madrid y que el ancho de vía sea europeo. "Hay que ser serios. Ningún empresario tiene documentación suficiente para discutir por dónde debe ir la línea de alta velocidad. Ésa es una cuestión de tres presidentes autonómicos y del ministro de Fomento", agrega, e insiste en que no existe ningún documento serio, empezando por el propio ministerio. Según Virosque, el consejo tratará este tema en su próxima reunión para la cual todavía no hay fecha.

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