Martínmorales pide mayor autonomía gráfica y temática para los humoristas

El curso de la Universidad de Granada El humor gráfico en la prensa actual, que durante esta semana reunirá en Almuñécar a humoristas de diversos medios de comunicación, comenzó ayer. Su director, el dibujante Francisco Martín Morales, habitual colaborador de Abc e Interviú, aseguró que los humoristas españoles gozan de "total independencia ideológica" para realizar su trabajo. Sin embargo, reivindicó más "autonomía" a la hora de elegir los contenidos y el aspecto gráfico de sus chistes.

En la presentación del curso, Martínmorales defendió el concepto de chiste de autor, donde los dibujantes de prensa puedan plasmar su ideología y su estilo sin limitaciones. El dibujante granadino aseguró que la prensa española no censura el contenido de las viñetas de sus colaboradores. Aunque reconoció "que algunos medios nacionales y locales" -no quiso decir cuáles- "sí piden a los humoristas que se ciñan a temas determinados e intentan cambiar el estilo de los dibujos". Martínmorales advirtió que en España no se debería llegar a la situación de Francia, donde Le Monde solicita a su humorista Plantu que haga hasta cuatro bocetos para adaptar el dibujo a la estética y al contenido de la página. "De este modo, el chiste dejar de ser de autor y no se respeta la independencia profesional. El dibujo no debería convertirse en complemento o apoyo de una información predeterminada por la dirección del medio". Participantes El curso que dirige Martínmorales intenta reconstruir la historia del humor gráfico en España, estudiar su situación actual y plantear soluciones de futuro a los problemas de la profesión. Hoy intervendrá como ponente Antonio Fraguas (Forges). Y en los próximos días pasarán por Almuñécar José María Pérez (Peridis), Máximo Sanjuán (Máximo) y Andrés Rabago (El Roto), todos ellos colaboradores de El País. También participarán Antonio Mingote, de Abc, y José María Gallego y Julio Rey (Gallego y Rey), humoristas de El Mundo. Martínmorales manifestó su sorpresa al comprobar que la mitad de los cuarenta alumnos del curso eran mujeres. Situación que aprovechó para reivindicar también un mayor protagonismo femenino en el humor gráfico. El dibujante recordó la escasez de mujeres españolas dibujantes, pese a que "quizá gocen de un mayor sentido del humor que el hombre".