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El PSOE denuncia el abandono municipal de la Casa de Campo

Antonio Jiménez Barca

Cristina Narbona, portavoz adjunta del PSOE en el Ayuntamiento, visitó ayer la Casa de Campo y se paró en sus "puntos negros": un tramo contaminado del arroyo Meaques, una fuente cegada, una escombrera... Acusó al PP de negligente y aventuró que, de abrirse un desvío de la M-30 que conecte con la nueva zona de prostitución, el parque soportará 5.000 coches más al día. El concejal de Medio Ambiente respondió con un dato: desde 1996 se han plantado 100.000 árboles.

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Narbona criticó el proyecto municipal de trasladar a las prostitutas de la zona del lago al cerro de Garabitas por dos razones: "Crea guetos, y nosotros estamos en contra de eso, ya que repercutirá negativamente, desde el punto de vista medioambiental, en el cerro de Garabitas y en toda la extensión de la Casa de Campo". Narbona calcula que al día cruzan por el parque cerca de 30.000 vehículos, cifra que en los fines de semana llega a 100.000. "Y si se comunica directamente el cerro de Garabitas con la M-30, tal y como está estudiando el Ayuntamiento, por la Casa de Campo cruzarán 5.000 vehículos más al día", añadió la portavoz adjunta. Narbona, además de visitar el cerro de Garabitas, se detuvo en otras zonas de la Casa de Campo que, a su juicio, están mal cuidadas por el Ayuntamiento: un tramo del río Meaques baja lleno de botellas, de botes y de preservativos; una fuente sin agua parece abandonada, y en medio de un área de reforestación, existe una escombrera que se llena de la tierra que llevan los propios funcionarios del Ayuntamiento. Un técnico del PSOE especificó que la arena almacenada en la escombrera procede de las obras que el mismo Ayuntamiento lleva a cabo en la Casa de Campo. "El problema es que el Ayuntamiento, por no buscarse otro sitio, hace que pasen por la Casa de Campo camiones de gran tonelaje. Y eso es muy perjudicial para el parque", dijo el técnico.El concejal de Medio Ambiente, Adriano García-Loygorri, salió al paso de las críticas de Narbona. Recordó que, a lo largo de los últimos tres años, en la Casa de Campo se han plantado 100.000 nuevos árboles y 150.000 nuevos arbustos. "Lejos de ser un fracaso y un despilfarro, como dice el PSOE, la gestión del Ayuntamiento en el parque está suponiendo la mayor rehabilitación de la historia de la Casa de Campo y ha merecido la aprobación de los técnicos de la Unión Europea que la han visitado", dijo García-Loygorri.

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Sobre la firma

Antonio Jiménez Barca
Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.

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