Cientos de albanokosovares bloquean la entrada en su pueblo de las tropas rusas de la Kfor

La avanzadilla de 50 hombres que tenía previsto entrar en la mañana de ayer al pueblo kosovar de Orahovac se encontró con un obstáculo imprevisto. Una fila de camiones, tractores y coches de un kilómetro de longitud, estacionados a lo largo de la carretera que lleva al pueblo de Orahovac, a 40 kilómetros al suroeste de la capital, Pristina, bloqueaban la entrada a la localidad.Los habitantes de Orahovac intentaban así impedir la entrada de los soldados rusos, que tenían asignada la custodia del pueblo como parte de las tropas de la Kfor. Los albanokosovares acusan a los rusos de haber colaborado con los paramilitares serbios en la limpieza étnica.

"Los rusos nos mataron", "No confiamos en Rusia", rezaban algunas de las pancartas que los vecinos de Orahovac habían desplegado a lo largo del camino. Algunos de ellos habían pernoctado en sus vehículos en la carretera

El coronel Andrei Serdukov, número dos de las tropas rusas desplegadas en Kosovo, se dirigió a los vecinos. "¿Cuál es el problema?", le preguntó. "Los rusos son nuestro problema", respondió uno de los vecinos. "Los rusos no han venido a matar y violar. A lo mejor lo hicieron los bandidos. También tenemos bandidos en nuestro país", replicó Serdukov.

Los vecinos de Orahovac se salieron con la suya y los dos jeep y el camión de transporte que formaban la avanzadilla de 50 hombres tuvieron que dar la vuelta hacia Pristina. El comandante de las tropas rusas de paracaidistas desplazadas a Kosovo, Georgi Shpak, afirmó ayer en Moscú que los soldados intentarán hoy entrar en Orahovac. "No hay problema. No entramos hoy, pero lo haremos mañana", aseguró.

Actualmente quedan en Orahovac unos 2.000 serbios. Los albanokosovares aseguran que las tropas rusas tienen la misión de proteger a los serbios de Orahovac.

Hasta el pasado viernes, los encargados de custodiar la población eran las tropas holandesas. Ese día, sin embargo, recibieron la orden definitiva de abandonar la población para que entraran 750 soldados rusos.