Rehenes del absurdo
TODO SECUESTRO es un crimen, pero los casos en que las víctimas son elegidas de forma aleatoria y arbitraria tienen un elemento añadido: su carácter absurdo. Tres turistas españoles, entre ellos dos religiosos, fueron secuestrados en Irán por unos desconocidos que, según todos los indicios, son miembros de una banda de traficantes de droga. Los secuestradores exigen la puesta en libertad de dos de sus cómplices detenidos hace unos días, después de un enfrentamiento con la policía iraní en el que murieron tres delincuentes.Las conversaciones de las autoridades iraníes con los secuestradores parecen haber comenzado ya y desde Teherán se insiste en que se espera la liberación próxima. Ojalá que así sea, y no como en algunos casos similares ocurridos en Colombia -hay tres españoles en esa situación-, en los que el drama se ha prolongado durante meses.
Los españoles viajan cada vez más al extranjero, por trabajo u ocio, y muchos tienen especial predilección por países en los que la seguridad dista de estar medianamente garantizada. Desgracias pueden suceder en cualquier sitio, y también en nuestro país son muchos los turistas víctimas de desaprensivos y criminales. Ahora se trata de intensificar al máximo la colaboración de autoridades españolas e iraníes. La integridad física de los secuestrados es la máxima prioridad. Ello implica impedir operaciones aventureras de las fuerzas de seguridad iraníes para evitar la repetición de tragedias como la habida en Yemen hace unos meses, cuando el secuestro de unos turistas occidentales se saldó con numerosas víctimas. Discreción, colaboración y flexibilidad son las consignas para lograr la libertad de nuestros compatriotas y evitar que el Gobierno iraní se vea en la muy difícil tesitura y ante el grave precedente de tener que ceder ante unos criminales que, independientemente de toda diferencia política e ideología, son enemigos de toda sociedad civilizada.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
Las empresas concentran el 8% de los bienes residenciales de Barcelona
Pellegrino Matarazzo, nuevo entrenador de la Real Sociedad: “Sé lo que hay que hacer”
Análisis de ajedrez | Perea, plata en el Mundial de rápidas sub-17
La justicia eleva a 975.000 euros la indemnización por el intercambio de dos bebés en Logroño en 2002
Lo más visto
- Lotería de Navidad 2025, en directo | 79432, el Gordo de la Lotería de Navidad
- Así te hemos contado las elecciones en Extremadura | El PP gana en Extremadura con 29 escaños, pero necesitará para gobernar a un Vox que crece
- Comprobar Lotería de Navidad 2025: consulta la pedrea con los números premiados
- Los jueces del Tribunal Penal Internacional se rebelan ante las sanciones de Trump: “No hay que ceder”
- Oona Chaplin: “Le conté a James Cameron que vivía en una cabaña en los árboles y que estaba iniciando un proyecto de permacultura con una amiga”




























































