Detenido en Sevilla el sospechoso de robar y apalear a un párroco en Cataluña
El pasado miércoles acabó en el sevillano barrio de Amate la larga (en tiempo y en espacio) huida de un hombre acusado de robar con extrema violencia al párroco de Canet de Mar (Barcelona). La Guardia Civil informó ayer de que el sevillano Manuel F. G., está en prisión como presunto autor de este delito. La historia se remonta al 25 de marzo. Según la versión oficial, el acusado entró en la casa del párroco de la citada localidad barcelonesa con la intención de hacerse con tanto dinero como le fuera posible. Según las investigaciones, el ladrón consiguió lo que quería y se llevó alrededor de 100.000 pesetas. Sin embargo, lo más espeluznante es que el suceso no se limitó al robo ni mucho menos: el religioso recibió una brutal paliza, en la que el agresor usó con saña sus puños, una navaja y un palo. El párroco se fue entonces hasta la comisaría de la Policía Local, desde donde fue trasladado a un hospital ante la evidente gravedad de las heridas que tenía en la cabeza, cara, cuello y brazos. Sin embargo, el religioso no ha querido hablar en ningún momento de lo que sucedió en su casa. La investigación llevó a la localización del sospechoso y el posterior seguimiento hasta Sevilla, en donde éste pretendía esconderse en casas de familiares.
