El fiscal abre diligencias por prevaricación contra Aberchan
La Fiscalía de la Audiencia Provincial de Málaga abrió ayer diligencias informativas por dos presuntos delitos de prevaricación y comportamiento injusto contra el presidente de Melilla, Mustafa Aberchan. El mandatario de la comunidad autónoma dictó un decreto en el que anulaba la renuncia de la diputada tránsfuga del PSOE Malika Mohamed el mismo día en el que la Junta Electoral Central resolvía en sentido contrario.El escrito, firmado por el fiscal jefe en funciones, Antonio Morales, señala que los hechos que se investigan pueden constituir un delito de prevaricación -dictar a sabiendas una resolución injusta- y otro de comportamiento injusto al proponer a Mohamed como parlamentaria siendo consciente de su ilegalidad. El Código Penal establece en el primer caso una pena máxima de 10 años de inhabilitación especial para cargo público y en el segundo dos años, además de una multa que puede alcanzar como tope 12 millones de pesetas.
La fiscalía malagueña ha decidido intervenir al comprobar que el Estatuto de Melilla no protege con un fuero especial a su presidente, por lo que la Audiencia se considera competente para investigar el proceder de Aberchan. Fuentes de este organismo adujeron que el presidente melillense debió recurrir la resolución de la Junta Electoral Central ante el Tribunal Supremo y solicitar la suspensión cautelar del dictamen.
Fuentes de la fiscalía advirtieron de que Aberchan puede incurrir en nuevos delitos si, tal como ha anunciado, celebra hoy el pleno de la Asamblea y excluye de ella al diputado del PSOE que tiene que reemplazar a Mohamed, Rafael Hernández Soler.
Querella
El consejo de Gobierno de Melilla acordó ayer emprender nuevas acciones judiciales. En primer lugar presentará un recurso de casación en el Tribunal Supremo contra la decisión de la Junta Electoral Central de devolver el escaño de Mohamed al PSOE. Además, el Ejecutivo de Aberchan va a querellarse por prevaricación contra los tres miembros de la Junta Electoral de Zona que acordaron acreditar como diputado al socialista Rafael Hernández Soler y no a Malika Mohamed. Mohamed ya recurrió ayer ante el Supremo la decisión de la Junta Electoral Central de considerar irrevocable su renuncia al escaño.Asimismo, Mohamed y el GIL recusaron a los tres vocales de la Junta Electoral de Zona por "sospecha de parcialidad". Esta junta decidió abstenerse y remitir sus informes a la Junta Electoral Central para que ésta decida en tres días si admite o no las recusaciones.
El consejero de la Presidencia, José Megías, anunció también que se va a pedir al Tribunal Constitucional que se pronuncie sobre el supuesto conflicto de competencias entre la Asamblea de Melilla y la Junta Electoral Central.
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