Las OPA de BNP, Paribas y SG se cierran sin un claro ganador

Tras seis meses de batalla financiera en la que los contendientes no han ahorrado esfuerzos ni gastos, la suerte del proyecto de "megabanco" francés promovido por la BNP quedó echada a las doce de la noche de ayer. El intento de "fusión a tres" destinado a crear el primer banco mundial en activos, aparecía anoche tocado por la incertidumbre, tras la clausura formal de la doble OPA hostil lanzada por la BNP contra Société Générale (SG) y Paribas. Los resultados de la operación se conocerán el día 17. Aunque las apuestas están al cabo de la calle, ningún analista independiente se aventuraba anoche a adelantar el desenlace de este enfrentamiento bursátil, el mayor en la historia de Francia, que ha alcanzado a unos 700.000 accionistas individuales (400.000 de Paribas, 300.000 de la SG) y a un millar de inversores institucionales en todo el mundo. La posibilidad de que la BNP se vaya a hacer con la mayoría de la SG parece descartada, incluso por los propios directivos de la primera de esas bancas, pero el control absoluto de Paribas podría bastarle para sacar adelante su proyecto siempre que su porcentaje de capital en SG la coloque en una posición de fuerza. El veredicto de los mercados, al que se sometieron las tres partes en litigio tras el fracaso de la mediación promovida por el Gobierno, no será dado a conocer, en todo caso, hasta el próximo día 17, fecha en la que el Consejo de Mercados Financieros (CMF) proclamará los resultados, con carácter provisional. Los intermediarios financieros depositarios de las acciones de SG y de Paribas disponen hasta el 13 de agosto para entregar los títulos a ParisBourse, organismo autorizado para el recuento de los títulos. Duelo El duelo que ha enfrentado a la BNP y su proyecto de "fusión a tres" con el tándem SG-Paribas, partidarias de continuar con su alianza bilateral, ha quedado momentáneamente suspendido, pero, dependiente de los resultados, puede prolongarse en las próximas semanas. Si la BNP consigue hacerse con la mayoría de Paribas pero no con la de SG, la situación volverá a hacerse explosiva. "Yo contesto el derecho de la BNP a conservar su participación en la SG si ella no obtiene la mayoría absoluta", ha adelantado el presidente de este último banco, Daniel Bouton. Una situación semejante forzaría a intervenir a las autoridades bancarias francesas, más o menos proclives al acuerdo entre los tres grandes bancos privados del país, pero su margen de maniobra estaría entonces sujeto al poder obtenido por la BNP dentro de SG. Asegurado el control de Paribas y deshecha, en consecuencia, la fusión SG-Paribas, la BNP podría intentar atraer a su proyecto de "fusión a tres" a aquellos accionistas, caso del español BSCH, hoy aliados con la dirección de la SG. La guerra de nervios y la movilización pueden continuar en las próximas semanas si el mercado no ha emitido un veredicto claro.