Elorza recuerda al diputado de Cultura el compromiso foral con el Museo San Telmo

El Museo San Telmo de San Sebastián fue ayer objeto de un controvertido cruce de acusaciones que trascendió hasta lo personal. La falta de implicación foral en el proyecto, sugerida en unas declaraciones del diputado de Cultura, Luis Bandrés, contrarió al alcalde, Odón Elorza, quien exigió de inmediato una rectificación y recordó al responsable foral el compromiso suscrito por esta institución en 1992 para la renovación del antiguo convento. El recién investido diputado de Cultura reseñó en una entrevista a El Diario Vasco: "Si el alcalde ha decidido lo que San Telmo va a ser, también deberá aportar el dinero. No me vale que un alcalde decida lo que le dé la gana y luego los demás tengamos que subirnos al carro. [...] Creo que es al Gobierno vasco al que le corresponde definir el plan museístico de la comunidad autónoma". Elorza recibió estas palabras como un jarro de agua fría y las juzgó "nada afortunadas, incorrectas y de muy poca educación". Pero más allá de las formas, insistió en que la Diputación ya rubricó "un compromiso político claro". Formó parte, con el Gobierno vasco y el Ayuntamiento, del jurado que eligió por unanimidad el proyecto para transformar San Telmo en el Museo para la Cultura Vasca, cuyo coste alcanza los 2.800 millones. En medio de la polémica, Elorza, quien instó a Bandrés a que "trate mejor a la capital guipuzcoana", lamentó: "Ya es casualidad que cada vez que se quiere hacer un proyecto en San Sebastián se le quiera dar la espalda con argumentos peregrinos, incorrectos y poco educados".