Desproporción

Resulta desproporcionado por parte de la Comunidad de Madrid que se esté pensando en implantar en los taxis un sistema de localización de emergencia mediante GPS para su supuesta seguridad. Teniendo en cuenta que el servicio del taxi es su negocio, que no del resto de los ciudadanos, lo normal sería que invirtiesen en él del mismo modo que lo hace un pastelero con un sistema de alarma o un joyero en un circuito cerrado de televisión. Sin embargo, son una minoría los que adoptan medidas como la mampara de seguridad, ni siquiera sufragándoles gran parte del coste la Administración. Además, es un estrepitoso agravio hacia los ciudadanos, al dar prioridad a la seguridad de los taxistas, pues sólo después de haberlo aplicado a la seguridad ciudadana y, por tanto, que todos los vehículos de emergencia públicos -de policía, ambulancias, de bomberos- estuvieran dotados de ese sistema GPS, quizá cabría pensar en la particularidad de los taxistas. Pero ni aun así estaría justificado ese plan, ya que primero habría que demostrar la ineficacia de la mampara, pero esto es indemostrable porque no la usan -la inmensa mayoría-, y por el contrario, ¿cuántos de ellos hay que, haciendo un buen uso de la mampara, hayan salido malparados de una agresión?, ¿ninguno, quizá?La solución es que la Comunidad de Madrid tenga clara la prioridad de la mayoría de los ciudadanos.-