HARRY GRIFFIN.
Director científico del Instituto Roslin de Edimburgo, Escocia. Se graduó en la Universidad de Leeds en 1973 en Bioquímica e hizo un posdoctorado en la Bowman Gray School of Medicine, North California (EE UU). Dice que la oveja Dolly ya no tiene interés científico, precisamente por ser única, aunque lo tenga para el público. Ahora trabaja en crear cerdos genéticamente modificados para trasplantes, "porque hay que centrarse en algo que vaya a representar una ventaja médica".
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