La Liga francesa arranca con un récord de abonados

La más madrugadora de las ligas europeas, la francesa, dará comienzo hoy, apenas dos meses después de que el Girondins de Burdeos se proclamase campeón. Precisamente el Burdeos se encargará de inaugurar la temporada 1999-2000 frente al equipo corso del Bastia. También jugarán hoy el Monaco y el Saint-Étienne, recién ascendido a la máxima categoría. La competición arranca en un estado de euforia económica, como resultado del reciente acuerdo para la venta de derechos de la competición, que ha multiplicado los ingresos de los clubes. Y esa euforia se desprende también del aumento de interés que ha despertado la Liga entre los aficionados, como lo prueba el hecho de que una buena parte de los equipos han batido récords de abonados para esta campaña.Ejemplos de este estado de optimismo los hay para todos los gustos. A pesar de su mala temporada, el Paris Saint-Germain, se ha unido también a la fiebre de los abonos. Los clubes punteros de la liga francesa han visto como la demanda de abonos se incrementaba de forma espectacular. El club parisino ha incrementado en 4.000 el número de sus abonados, mientras el Lens (campeón en 1998) lo hacía en 8.400, el Girondins de Burdeos en 6.500, el Lyón en 6.200 y el Nantes, actual campeón de la Copa de Francia (comparable a nuestra Copa del Rey), suma 5.600 abonados más.

Fichajes millonarios

El clima de optimismo se ha trasladado al mercado de fichajes, donde el fútbol francés ha estado tradicionalmente en desventaja. Los clubes franceses han fichado con cierto descaro y la Liga se presenta con cuatro clubes que ambicionan estar en la lucha por el título: el Burdeos y el Olympique de Marsella, que se disputaron hasta el final la pasada liga, a los que se suman el Mónaco y el Olympique de Lyón.Este último cuenta con uno de los fichajes más caros en la historia de Francia, el brasileño Sonny Anderson, por el que el Lyón ha pagado al Barcelona casi dos mil millones de pesetas. Anderson ya conoce el campeonato francés. Contribuyó con 19 goles al título obtenido por el Mónaco en la temporada 1996-1997.

En la primera división francesa también jugará otro viejo conocido de la afición española, el también ex barcelonista Iván de la Peña. El cántabro ha sido cedido al Olympique de Marsella por el Lazio, club en el que no llegó a despegar la pasada temporada, donde apenas actuó como titular en cinco partidos. La llegada de De la Peña y del internacional argentino Berizzo servirá para calmar los ánimos en el Marsella, caldeados tras la marcha del ídolo nacional, Laurent Blanc, traspasado al Inter de Milán.

Quien más difícil parece tenerlo es el París Saint-Germain, al que le espera una dura temporada. Su novena plaza en la Liga le ha apartado de Europa por primera vez desde 1992. El club parisino ha buscado en Brasil la solución con los fichajes de César, del Portuguesa, y Christian, del Internacional.