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Los constructores evalúan en dos billones las inversiones en infraestructuras hasta el 2006

La Comunidad necesita invertir en los próximos seis años dos billones de pesetas en infraestructuras para converger con el resto de la Unión Europea. Es la estimación realizada por los constructores de obras públicas valencianos (Fecoval), que ayer presentaron un informe con una lista de actuaciones a ejecutar antes del 2006, año en que la autonomía perderá su condición de Objetivo 1. Los trasvases Ebro-Mijares y Júcar-Vinalopó, la limpieza del río Segura, el tren de alta velocidad, la autovía Sagunto-Somport o la ampliación de las circunvalaciones de Alicante y Elche son prioritarias para Fecoval.

"No es un informe reivindicativo, sino cómo pensamos que debe ser la Comunidad Valenciana en el año 2006", manifestó ayer el secretario de Fecoval, José María Gómez, durante la presentación del informe. Los constructores estiman en 400.000 millones de pesetas el gasto total en carreteras, ya que el 80% del transporte de personas y mercancías se realiza por esta vía. "Acabada la N-III, es preciso hacer las autovías de Alcoy-Alicante [40.000 millones de pesetas], la autovía de las comarcas centrales [6.000 millones], la conclusión del tramo valenciano de la autovía Sagunt-Somport [19.000 milloneas], la autovía de La Plana [14.000 millones], y la ampliación de las circunvalaciones de Alicante y Elche [15.000 millones], al borde del colapso; y la ronda sur de Valencia [6.000 millones]", enumeró el presidente de Fecoval, Juan Cámara. Los empresarios consideran, por otro lado, que el aumento de viajeros por ferrocarril justifica la construcción de una línea de alta velocidad que una la Comunidad con Madrid. Fecoval, a falta de que se concrete el trazado, estima en 400.000 millones el coste de esta obra. El resto de la inversión se destinaría al parque central de Valencia (80.000 millones), a la conversión del corredor mediterráneo en un eje de velocidad alta (220 kilómetros por hora), que ahora sólo funciona entre Barcelona y Castellón; y a la ampliación de la red de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (74.000 millones). En el capítulo de obras hidráulicas es imprescindible la construcción de los trasvases Ebro-Mijares (30.000 millones) y Júcar-Vinalopó (25.000 millones), así como la descontaminación del río Segura. "Debemos hacer todos los esfuerzos para que no se desaproveche ni una sola gota de agua", apostilló el secretario de Fecoval. El resto de actuaciones se concretaría en la construcción de defensas contra avenidas en La Safor y las dos Riberas. La ordenación y regeneración del litoral norte de Valencia y del litoral sur de Alicante, así como el acondicionamiento de la costa entre los puertos de Sagunto y Castellón completan las actuaciones más urgentes para los constructores valencianos. También debería atenderse la conversión del puerto fluvial de Cullera en uno marítimo. Para todo este apartado se ha estimado un gasto de otros 60.000 millones de pesetas. Por último, Fecoval evalúa en 45.000 millones la inversión necesaria para el adecuado tratamiento de los residuos sólidos. Estos fondos servirían para acometer la construcción de 20 ecoparques, 12 estaciones de transferencia de residuos urbanos, 16 plantas de clasificación y recuperación de envases, 12 plantas de compostaje, un vertedero controlado de baja densidad y otros 13 del alta densidad. Fondos europeos El informe no precisa las fuentes de financiación, que procederían del Estado y de la Generalitat e incluso del sector privado. "La convergencia con Europa no es sólo una cuestión presupuestaria", subrayó Cámara, para quien los 1,8 billones de pesetas de fondos europeos asignados a la Comunidad por su condicíón de región Objetivo 1 para el periodo 2000-2006, podrían sufragar las obras contenidas en el informe. La federación autonómica de constructores, cuyos asociados facturan 120.000 millones de pesetas al año, solicitaron a la Generalitat que simplifique los trámites burocráticos para acceder a los concursos para la adjudicación de obras públicas de forma que las empresas locales tengan mejores oportunidades frente a las grandes constructoras. Los contratistas han elevado en los últimos años su participación en la obra pública de un 22% a un 33%. Los dirigentes de Fecoval anunciaron, por otro lado, la constitución, prevista para septiembre, de un consorcio formado por 19 grandes constructoras valencianas, así como dos cajas de ahorros, para presentarse a concursos en otros países, principalmente en el norte de África y en Suramérica.

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