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Tercera Vía

Mientras el presidente Aznar era instado por todo el mundo árabe a solucionar el problema de Oriente Medio, a pesar de que el señor presidente confesó, honestamente, que se había dejado los donuts o la cartera en Madrid, el supuesto cerebro de Blair, Mr. Giddens, responsable de la famosa Tercera Vía, visitó España sembrando a su paso la confusión cuando no el pánico sobre los objetivos de tan nuevo camino. Declaró en Barcelona que Blair es como Margaret Thatcher pero con sonrisa y que la izquierda debe dejar de ser de izquierdas, propuesta que sugiere tres posibles interpretaciones: que Mr. Giddens tuviera un día tonto, al alcance de las personas y los misiles más inteligentes; que fiel a Groucho quisiera demostrar la perpetua necesidad de romper la convencionalidad del lenguaje; finalmente, que si la izquierda realmente pudiente, la socialdemocracia hoy en el poder en Europa, quiere detentar mayorías electorales, sin precisar para qué, ha de dejar de ser de izquierdas. ¿Qué va a ser de las derechas?Giddens reconoció que a pesar de haber dejado de ser de izquierdas, Blair ha tenido resultados malísimos en las últimas elecciones y proponía preguntarse por qué. Inútil pregunta. Si ha tenido malos resultados no es porque las masas hayan rechazado la oferta de cine de terror de la conversión de Blair en una Margaret Thatcher sonriente, sino porque las masas se han dado cuenta de que las izquierdas no han dejado de ser de izquierdas suficientemente, tal como demanda a gritos la modernidad. Luego, Mr. Giddens paseó sus teorías por El Escorial, donde trató de implicar a Felipe González en su contraproducente campaña de promoción de terceras vías globales. Afortunadamente, González, sabedor de que se puede morir de éxito, no quiso morir aplastado por la Tercera Vía, y aunque volvió a lancear el cadáver del comunismo y puso la gran cruz de Largo Caballero, es un decir, a los empresarios partidarios de arriesgarse, marcó diferencias cuando el pérfido inglés le señaló nada menos que como el padre de la Tercera Vía.

Aviso a los partidarios de la Tercera Vía. Un provocador peligroso que dice llamarse Mr. Giddens recorre Europa pagado por fondos reservados, sean del Dr. No, de Milosevic o de Fu Manchú.

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