La experiencia de las factorías en los países del este de Europa

La presencia de Kelme en el mundo se establece, además de una red de distribuidoras y oficinas, a través de los centros de producción que la mercantil mantiene en lugares estratégicos de diversos continentes. La experiencia llevada a cabo en los países del este de Europa es una de las más importantes apuestas de la marca de la garra. El centro de Kelme en Moscú ocupa una superficie de 3.000 metros cuadrados y se encuentra integrado en el Consorcio Español de Exportación. El enclave crea canales de distribución para cubrir los mercados potenciales fuera de las zonas de influencia de las factorías. En la República de Bielorrusia, con un volumen de producción anual de 800.000 a un millón de pares anuales, la marca mantiene una sociedad mixta con un 33%. En la República de Bashkiria la producción se diversifica entre el calzado, colas y complementos del zapato. Con una participación del 34%, la mercantil ilicitana alcanza el millón de pares, y más de tres millones de complementos de calzado. El último enclave ruso, en la República de Moldavia, con una participación del 34% , Kelme fabrica más de dos millones de pares. A las fábricas del Este hay que sumar las producciones que se realizan en América del Sur, Asia y España. La Olimpiada de Barcelona En un rápido recorrido por las imágenes recientes aportadas por la televisión, la celebración de la Olimpiada Barcelona"92, ocupa uno de los primeros puestos en los recuerdos pegados a nuestras retinas. Allí, y no por casualidad, se encontraba la firma ilicitana Kelme que con una gran inversión patrocinó el vestuario de los atletas españoles. El éxito del certamen además de ayudar a la consolidación de la marca a nivel nacional, supuso uno de los puentes fundamentales tendidos por la firma de la garra para lanzarse al mercado internacional. De hecho, poco tiempo después, la mercantil abría la primera oficina exterior en Miami. Al año siguiente se producía la penetración en el mercado japonés y se inauguraban varias filiales en diversos lugares estratégicos de Europa, conformando una importante red de distribución y venta. El fútbol y el ciclismo han sido los dos pilares que, de manera ininterrumpida, han sostenido la propaganda de la empresa y que, curiosamente, coinciden con las preferencias de cada uno de los hermanos que regentan el negocio: José Quiles, que dirige el equipo ciclista Kelme, y Diego Quiles, presidente del Elche Club de Fútbol. Pese a los gustos personales de los propietarios, el apoyo a los dos deportes también tiene una explicación clave con los estudios de mercado en la mano. Cuando finaliza la temporada futbolística las bicicletas toman las carreteras en las sucesivas jornadas del Giro, el Tour y la Vuelta. De esta manera, la cuota de pantalla queda segurada.